Rajoy reivindica su victoria electoral en el Congreso
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El presidente del Gobierno español en funciones, Mariano Rajoy, apeló hoy al consenso para que España supere la "encrucijada" que vive tras ocho meses de bloqueo.
El presidente de Gobierno español en funciones y líder conservador, Mariano Rajoy, reivindicó hoy la victoria electoral de su partido en las dos últimas comicios celebrados en España y solicitó apoyo para alumbrar un gobierno "con urgencia" tras ocho meses de bloqueo.
Rajoy inauguró hoy con un discurso en el Congreso la primera sesión de investidura con la que quiere revalidar su mandato, y que mañana contará con una primera votación, aunque todo apunta a que fracasará ya que solo cuenta con el apoyo de su grupo y dos partidos minoritarios, insuficientes para alcanzar los 176 votos necesarios.
El líder del conservador Partido Popular (PP), que ganó las elecciones aunque sin mayoría absoluta en los dos últimos comicios, advirtió que España necesita un Gobierno "con urgencia" y argumentó que, a excepción de la suya, actualmente no existe una "alternativa razonable", salvo que algún otro partido quiera "juguetear" de nuevo con la paciencia de los españoles o "repetir elecciones".
El jefe del Ejecutivo en funciones respaldó su candidatura en su gestión de la última legislatura que, a su juicio, consiguió salvar al país del "desastre económico" de la crisis.
Tras ocho meses de bloqueo político y sin visos de conseguir un pacto entre varios partidos en un futuro próximo, Rajoy apeló a la necesidad de formar un Ejecutivo "sólido, duradero, estable y tranquilizador" que dé confianza.
"Difícilmente se me ocurre mayor daño a los ciudadanos que tener que repetir las elecciones por tercera vez (...) Nos corresponde la obligación de dar cumplimiento a ese mandato y no volver a defraudarles", conminó a los diputados de la Cámara baja española.
Entre las propuestas para su futuro Gobierno, el líder conservador apostó por un pacto nacional contra la violencia de género, un acuerdo para garantizar las pensiones y otro en materia educativa.
Rajoy contará en la votación de mañana, salvo sorpresa mayor, con 170 votos a favor, los del conservador PP (137), los liberales de Ciudadanos (32), y una diputada nacionalista canaria; y en contra 180, los del socialista PSOE (85), la coalición de partidos de izquierda Unidos Podemos (71) y los nacionalistas catalanes (13) y vascos (5).
Advierte que su opción es la única viable para evitar nuevos comicios
El presidente del Gobierno español en funciones, Mariano Rajoy, apeló hoy al consenso para que España supere la "encrucijada" que vive tras ocho meses de bloqueo, y advirtió que su Gobierno es la única opción viable para evitar unos nuevos comicios de los que todos serían "corresponsables".
El fantasma de una nueva cita electoral, la falta de alternativa a su candidatura y la apuesta por un programa político basado en acuerdos de Estado, centraron hoy el discurso del líder conservador durante la primera sesión de su investidura en el Congreso español.
La Cámara baja reanudará mañana el debate con la intervención de los partidos en la oposición y celebrará una votación de confianza al candidato, en la que todo apunta al fracaso de Rajoy, ya que no cuenta con el apoyo parlamentario suficiente.
Pese a su previsible derrota, el líder conservador pidió a los diputados que, en aras del interés general, apoyen su investidura y el país cuente cuanto antes con un Ejecutivo, pues el actual lleva en funciones 253 días.
"Difícilmente se me ocurre mayor daño a los ciudadanos que tener que repetir las elecciones por tercera vez (...) Nos corresponde la obligación de dar cumplimiento a ese mandato y no volver a defraudarles", argumentó ante el pleno de la Cámara baja española.
Rajoy alcanzó en los últimos días un acuerdo de investidura con dos partidos minoritarios que le otorgan 170 votos: los de su grupo el conservador Partido Popular (137), los liberales (32) y el nacionalista canario (1).
Para superar la votación de mañana el candidato debe contar con mayoría absoluta (176 votos). Tendrá una segunda oportunidad el viernes, para la que necesita más síes que noes, pero tampoco cuenta con el apoyo suficiente, ya que el resto de partidos le niegan el apoyo.
El jefe del Ejecutivo apostó en su discurso por un programa de legislatura vertebrado en siete pactos de Estado en varias áreas: empleo, educación, pensiones, energía, igualdad entre regiones, lucha contra la violencia de género y reforma de las instituciones.
En materia de corrupción, el candidato conservador, aseguró que su Ejecutivo ha puesto en marcha mecanismos para recuperar "hasta el último euro robado por los corruptos" e indicó que este tipo de delitos se persiguen "más que nunca" y los castigos "son los más elevados que se han conocido".
La mayoría de partidos niegan el apoyo a Rajoy tras una legislatura marcada por la reducción en gasto social y la vinculación de su partido con distintos casos de corrupción. A principios de octubre da comienzo un juicio sobre la financiación ilegal del partido.
Al final de la sesión, en el que solo intervino Rajoy, el portavoz del socialista PSOE, Antonio Hernando, acusó al conservador de entonar el discurso de un "burócrata" y un "político cansado" con un proyecto "agotado".
"Su intervención ha sido cualquier cosa menos la de un candidato con ganas, ambición de futuro y ganas de cambiar España", argumentó.
Por su parte, el líder de la coalición izquierdista de partidos Unidos Podemos, Pablo Iglesias, consideró que los argumentos del candidato conservador a la reelección se han basado en el dilema de "el caos o yo".
Incluso el portavoz de Ciudadanos, Juan Carlos Girauta, con cuyo partido ha alcanzado un acuerdo, le reprochó que no haya hecho "ni una sola referencia" a los socialistas para pedirles apoyo, y haya mostrado una "falta de fe" en su candidatura que el partido liberal no entiende.
"Si no se pone la voluntad y la energía para ser investido, no la pondrán por él", reprendió.
Mañana, la sesión contará con la intervención del resto de partidos, de mayor a menor representación parlamentaria. Una vez finalicen todas las intervenciones, tendrá lugar la primera votación y, de no salir adelante, como es previsible, se celebrará una segunda el viernes.
Si como es de esperar ambas votaciones son fallidas, se pondrá en marcha el mecanismo legislativo para la convocatoria de nuevos comicios.
Durante un periodo de dos meses se pueden presentar otros candidatos, incluso repetir Rajoy, pero si ninguno resulta elegido el Parlamento se disolverá el 31 de octubre y las elecciones tendrán lugar el 25 de diciembre, Día de Navidad.