¿Chips para monitorear a estudiantes de secundaria? En Monclova rumores se viralizan en redes
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De acuerdo con información difundida por medios locales, se planea utilizar una tarjeta con tecnología de geolocalización que los alumnos deberán portar diariamente
MONCLOVA, COAH.- En un intento por mejorar la seguridad y el control de asistencia, la secundaria número 1 “Juan Gil González” de Monclova ha generado controversia al surgir rumores sobre la implementación de chips con GPS para monitorear a sus estudiantes.
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Aunque las autoridades escolares no se han pronunciado oficialmente sobre el tema, la noticia ha causado revuelo en redes sociales y entre la comunidad educativa.
De acuerdo con información difundida por medios locales, se planea utilizar una tarjeta con tecnología de geolocalización que los alumnos deberán portar diariamente. Este sistema, similar al de algunos centros de trabajo, funcionará mediante barras magnéticas instaladas en la entrada y salida del plantel, registrando la hora exacta de ingreso y salida de los estudiantes. Además, la tarjeta contará con un rastreador GPS para monitorear la ubicación de los alumnos en tiempo real.
La principal motivación detrás de esta medida es evitar que los estudiantes se ausenten de las clases sin justificación y controlar conductas indebidas fuera del plantel. Esta tecnología se implementará con la intención de proporcionar un mayor nivel de seguridad y supervisión.
No obstante, la implementación de esta tecnología ha generado opiniones divididas entre los estudiantes y padres de familia. Mientras algunos consideran que el uso del GPS mejorará la seguridad y el control escolar, otros expresan su preocupación por la privacidad y las implicaciones de ser monitoreados constantemente.
Hasta el momento, los directivos del plantel no han confirmado ni desmentido la información y no han estado disponibles para ofrecer comentarios al respecto.
La comunidad educativa espera un pronunciamiento oficial que aclare la situación y detalle los alcances y limitaciones de esta posible medida.
En cualquier caso, la discusión sobre el uso de tecnología para monitorear a los estudiantes está lejos de terminar y pone en el centro del debate la balanza entre seguridad y privacidad en el entorno escolar.
(Con información de medios)