Entre dimes y diretes, polemizan saltillenses por vivienda vertical
Desde ‘espacio hay de sobra’ a quejarse por ser caros, presagiar corrupción y verlos como gran alternativa, comentarios recorren todo el espectro de opinión
Luego de que el Cabildo de Saltillo dio el visto bueno para la construcción de tres desarrollos inmobiliarios de vivienda vertical, dos de ellos de usos mixtos, y para lo cual aprobó los respectivos cambios de uso de suelo; la reacción en redes ha sido dispar.
Mientras hay quien celebra que se construyan edificios en diferentes plantas ascendentes, con la visión de expandir la ciudad a lo alto y no a lo ancho, otros afirman que espacio en la ciudad es lo que sobra.
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A estos cuestionamientos en la página de Facebook de VANGUARDIA, se suman otros que poco tienen que ver con virtudes o defectos arquitectónicos o de urbanismo, y critican que estos proyectos se armen para beneficiar a contratistas o familiares de funcionarios, a que hay temas más importantes que atender que construir edificios, o que estos departamentos son inalcanzables para la mayoría de los saltillenses.
ENTRANDO EN POLÉMICA
Para César Banda Gutman, quien afirma no estar contra la modernidad y el desarrollo, es más importante la obra pública y mejorar el transporte y los servicios de agua: “pero hemos visto cómo en los últimos años no hay nada de inversión pública y no la habrá porque el estado está mega endeudado”.
Si bien un proyecto de vivienda vertical, en el que privados invierten su capital, no compromete la obra pública, que es responsabilidad de los gobiernos, el comentario de Banda Gutman recibió múltiple respaldo.
Rulo López igual criticó las malas vialidades de Saltillo y la deficiente obra pública y puso su solución por delante, a lo que Israel PM respondió que en estos proyectos de vivienda no se mete el estado, ya que son obra de constructoras privadas.
MODERNIZANDO EL NORTE
Los tres proyectos que se aprobaron se centran en el norte de Saltillo, uno en el predio marcado con el 1180 de la calle San Juan Bautista, en la colonia Los Valdez, donde se solicitó y aprobó la construcción de un edificio de 24 departamentos con una cafetería/restaurante y venta de bebidas alcohólicas.
Otro en el bulevar Eulalio Gutiérrez cruce con bulevar Rotarismo, donde se aprobó el cambio de uso de suelo de Corredor Urbano a Subcentro Urbano y otro más en el bulevar José María Rodríguez, colindando al poniente con el Colegio Americano, para una plaza comercial con departamentos.
CON BUENOS OJOS
Estas que se perfilan como modernas construcciones, para Ana Luisa Leza Hilario son una gran opción para los jóvenes, “que ya no desean tener hijos y pues ya tiene todas sus amenidades (sic).
Mientras que María Angélica Valencia no le ve el caso a esto, porque los pondrán “a precios extremadamente caros, haciendo inaccesible la vivienda, además de tener pocos metros cuadrados”.
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Es significativo que la mayoría de las críticas chocan con las razones que dan los expertos para apoyar la construcción de vivienda vertical, a saber que mejora la calidad de vida porque en una edificación pueden estar todos los servicios, es una alternativa sustentable porque con su construcción se preservan más áreas verdes y representa un ahorro para quienes lo habitan debido a que suele estar ubicado en zonas estratégicas.
Además de que las personas viven más cerca de centros de trabajo, centros comerciales e instituciones educativas, hay un ahorro en traslados por la posición estratégica de la vivienda, el mantenimiento es más barato porque es compartido.
‘PRUEBA VIVIENTE’
Un ejemplo de lo útiles y rentables que estas construcciones pueden llegar a ser es el Condominio Reforma, en la Ciudad de México, que fue construido en 1956 por Mario Pani y Salvador Ortega.
Este condominio fue el más grande de la época porque contaba con 13 pisos, 12 de ellos para departamentos y una planta baja con 23 locales. Un importante antecedente de la vivienda que predominará en el futuro.