Monjas dominicas llevan más de 33 años vendiendo roscas de Reyes a los monclovenses
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MONCLOVA, COAH.- Roscas del día de Reyes, preparadas en medio de oraciones y el padre nuestro, son elaboradas por las Monjas Dominicas en la zona centro de Monclova, Coahuila.
Durante los últimos 33 años, las madres que llegaron desde el monasterio de Morelia, se han reconocido por preparar sabrosos panes y roscas, a costos muy bajos.
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Al interior de la Iglesia Santa Teresita, ubicada en la calle Progreso, las siete hermanas, comenzaron a preparar la masa para las roscas de este 2024.
A decir de Sor Julia, aproximadamente 300 roscas en diversos tamaños serán elaborados y vendidos a las familias monclovenses.
Son productos que van desde los 120, 240, 360 y hasta 480 pesos, por lo que la población compra con agrado.
“Agradecemos el apoyo, tenemos varias historias bonitas, han llegado a venir personas, como una embarazada y ya no había, dijo que había escuchado en la radio y se le antojó comer una rosca, nosotros como pudimos sacamos una pequeña masa y la hicimos, al año vino y dijo este es el bebé del antojo de la rosca”, comentó la madre.
La población las ha apoyado año con año, debido a que es pan bien elaborado, con un buen sabor y decoración, además está preparado en medio de los rosarios y las oraciones y bendiciones que realizan las madres dominicas
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Las madres llegaron a Monclova desde hace más de 33 años, salieron del Monasterio de Morelia, donde había una gran cantidad de hermanas, por esta razón se distribuyeron a diversos lados de la república.
Estuvieron ocho años en Villa María, propiedad de la Diócesis de Saltillo, en Castaños y luego se canalizaron a la Iglesia Santa Teresita en la Zona Centro de Monclova donde permanecen hasta el día de hoy.
Actualmente son nueve madres, siete laboran en la elaboración de pan.
“Nosotros tomamos el rasgo de que Jesús se va a la soledad a orar al monte en la noche, en el silencio, Santo Domingo de Guzmán fue el fundador de nuestra orden, por ello nos llaman dominicas”, dicen.
Personas de Monclova y otros municipios han acudido hasta la iglesia donde les piden que les pongan en sus oraciones para ayudar a resolver sus problemas.
“Somos como las raíces de un árbol, que no se ve pero es muy necesaria”, dijo sor Julia, quien finalmente invitó a las familias a seguir unidas y a que no se pierda esa cercanía, que no se vuelvan egoístas si no que sigan viéndose como en este día de reyes para que prevalezca la unidad que la hace fuerte a las personas.