Saturado el panteón de Arteaga; ya no cabe ni un alma
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Autoridades del Pueblo Mágico se ven en la necesidad de abrir un nuevo cementerio
En el panteón municipal San Isidro de Arteaga ya no cabe ni un alma. Antes de la pandemia en el cementerio sepultaban 2 cuerpos cada 15 días, mientras que ahora son enterrados hasta 4 cada día para su eterno descanso.
“Las carrozas funerarias transitan como carrusel”, aseguró Virgilio Vidales, encargado del cementerio.
“Hay espacios vacíos pero ya están vendidos, la gente que entierran son quienes ya se habían hecho de una fosa y cada quien le paga a un maistro para cerrar la tumba”, agregó el también vigilante, quien en un solo día supervisó la sepultura de 3 jóvenes menores de 25 años, cuyas causas de sus muertes se desconocen.
Virgilo Vidales aseguró que aunque el número de muertes de arteaguenses ha llenado el panteón en menos tiempo del que se estimaba, no todas son por fallecimientos de coronavirus.
Por su parte, Evarardo Durán Flores, alcalde del Pueblo Mágico, confirmó la saturación del cementerio e informó que la apertura de un nuevo espacio para el eterno descanso de los fallecidos, construido en el Cañón de La Roja, en al menos dos meses más, mientras los trámites y permisos se concretan.
“Poco a poco se acabaron los espacios del panteón, está lleno, estamos viendo la manera de también poner algunos nichos de la mano de una empresa y tratar de solucionar esta problemática, porque a final de cuentas quienes fallezcan de COVID-19 preferimos que sean cremados”, comentó el Edil.
Durán Flores agregó que los últimos espacios fueron vendidos durante la pandemia y debido al limitado espacio del panteón, ya no fue posible cavar más fosas.
Hasta el momento Arteaga registra un total de 118 casos de coronavirus, de los cuales han muerto 15 personas y 5 más se encuentran con el virus activo.
Cabe destacar que anteriormente VANGUARDIA publicó la caída en la detección de males crónicos hasta un 74 por ciento durante 2020 en comparación con el año anterior, debido a la atención médica volcada a la pandemia y la resistencia para acudir a clínicas y hospitales, por lo cual también podría aumentar el número de muertes, sin que sean a causa del coronavirus.