¿Cómo surgió el grito homofóbico en el fútbol mexicano?
El grito le ha sumado 17 sanciones tanto para la Selección Mexicana y la FMF, debido a que es discriminatoria
En las gradas se escucha la frase levantándose desde el silencio, para concluir con “put*” palabra en forma peyorativa para referirse a los homosexuales en México, en su mayoría como insulto.
Sin embargo, el grito también captura el espíritu deportivo mexicano.
La primera ocasión donde se escuchó el grito homofóbico en los estados mexicanos de fútbol en 2003, cuando la afición de Atlas en el Estadio Jalisco insultó al portero de Chivas, Oswaldo Sánchez.
“San Oswaldo” se formó con el conjunto rojinegro, pero años más tarde ficho con el Guadalajara, el máximo rival de los zorros; debido a esta “traición” comenzó la expresión. Desde ese entonces el grito se popularizó en los torneos locales.
Fue hasta el 10 de febrero de 2004 que la expresión llegó a la selección nacional, de nueva cuenta en el Estadio Jalisco cuando la Selección Nacional se enfrentó a Estados Unidos en un duelo preolímpico de la CONCACAF.
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“Hasta que veo la repetición del partido es que escucho el grito, ahí es donde se inauguró algo que no es correcto... La gente quería transmitir eso, pero quedó marcado”, mencionó el convocado nacional Juan Pablo García, quien estuvo en el duelo contra EU.
Tras su clasificación a los Juegos Olímpicos de Atenas 2004, el grito comenzó a crecer a pasos agigantados.
Saltó como el apoyo a la selección mexicana en el Mundial de Alemania 2006; caso contrario al las últimas Copas del Mundo y el cercano Qatar 2022, la FIFA no tuvo problema alguno en aceptar la consigna cada vez que un portero realiza un saque.
Tras una década de escuchar el grito en cada partido de México, FIFA intervino. Este llegó al Mundial de Brasil 2014, el Tricolor y la Verdeamarela se enfrentaron en el segundo juego de la fase de grupos, la expresión como era de esperarse apareció en cada despeje del portero Julio Cesar.
Sin embargo, cada vez que los aficionados aztecas decían esta frase, los fanáticos locales comenzaron a imitar la expresión cada vez que Guillermo Ochoa hacía el saque de meta.
A través de un comunicado, FIFA informó que “su Comité Disciplinario investigó acusaciones de conducta incorrecta de los mexicanos y descartó todos los cargos”.
Aunque la Federación ya estaba al tanto del grito, este siguió en los partidos de la Liga MX y del Tricolor como local.
Fue durante el partido de México contra El Salvador (con marcador de 3-0) en noviembre de 2015, así como el inicio de las eliminatorias con rumbo al Mundial de Rusia 2018, que llegó la primera multa a la Federación Mexicana de Fútbol (FMF).
México se defendió y declaró a la FIFA que el grito no era homofóbico, argumento que no logró salvarle de la multa. La FMF pagó 20 mil francos suizos (cerca de 395 mil pesos) en enero de 2016.
FIFA castigó al Tricolor por emitir la expresión en los juegos de eliminatoria contra Canadá y Honduras. Meses más tarde, en los duelos contra Estados Unidos y Panamá, la afición siguió con el grito.
En total, la FMF pagó 2 millones 115 mil pesos en 2016 por multas; comenzando a dañar la economía del órgano mexicano.
FIFA advirtió a México, pese a que las multas no se detuvieron, la posibilidad de perder puntos o quedar fuera de competencias internacionales si este no paraba.
FIFA y FMF pusieron mano dura durante la Copa Confederaciones de Rusia 2017 e implementó un protocolo para que la gente emitiera el grito. Aunque se pedía no continuar con el grito, la afición mexicana fue expulsada de los estadios.
En el Mundial de Rusia 2018, durante el juego entre México y Alemania, el grito reapareció, así que la FIFA castigó a la FMF con 205 mil pesos y el veto de los seguidores.
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Se viralizó al punto que la Liga MX y la FMF implementaron un protocolo estricto para que desapareciera. En el cual se detenía cinco minutos el juego y si esta seguía los jugadores tendrían que abandonar el campo y el duelo se suspendería.
Cuando se creía que este iba a desaparecer, los aficionados en el enfrentamiento Morelia - León por los Cuartos de Final del Torneo Apertura 2019, comenzaron a usar el grito contra Rodolfo Cota y José Alfredo Peñaloza, deteniendo el juego en dos ocasiones.
Comisión Disciplinaria de la FIFA sancionó a FMF con una multa de 100 mil francos suizos (cerca de 2 millones 288 mil pesos) y dos partidos como local sin público a consecuencia de los actos discriminatorios vividos en las eliminatorias rumbo a Qatar 2022 con Canadá y Honduras.
El 8 de septiembre el encuentro ante Canadá tuvo que suspenderse para cumplir con el protocolo por los gritos en el Estadio Azteca. En junio de 2021, la FMF recibió una multa de más de un millón de pesos y dos encuentros de veto, que logró a reducir a uno, por lo que el único partido que se jugó a puerta cerrada fue en el Azteca de México frente a Jamaica.
