Consuma

BARCELONA.- El primer año futbolístico del Barcelona sin Lionel Messi era ya malo. Ayer se tornó peor.

Luego que el poderoso conjunto español fue eliminado de la lucrativa Liga de Campeones, ahora quedó noqueado en la Europa League, el torneo europeo de segunda categoría

El Eintracht Fráncfort sorprendió al Barza en el mismísimo Camp Nou, al imponerse por 3-2 para avanzar con un marcador global de 4-3.

Barcelona tuvo la posesión del esférico. Fráncfort logró los goles.

En un comienzo inmejorable por parte de los visitantes, Filip Kostić los puso adelante 1-0 con un penal, a los 4 minutos del duelo, engañando al arquero Marc-André Ter Stegen, quien se venció al otro costado.

Tras el empate 1-1 en la ida, Rafael Santos Borré elevó a dos tantos la ventaja de la escuadra alemana, todavía en el primer tiempo, con un portentoso disparo, desde fuera del área y a un ángulo.

La estirada de Ter Stegen fue un ornamento más en el golazo del colombiano, cuyo festejo fue emotivo.

Mirando a la cámara, Santos Borré señaló con un dedo el número que llevaba en el pantaloncillo. Ese mismo 19 fue portado alguna vez en la selección colombiana por el ex capitán Freddy Rincón, fallecido en la jornada a los 55 años por las heridas que sufrió en un accidente automovilístico.

Tras el gesto, Santos Borré juntó las palmas de sus manos, como si rezara.

Filip Kostic hizo la tercera diana a los 67. La reacción de los locales no llegó sino en los descuentos, con tantos de Sergio Busquets y del sustituto Memphis Depay (de penal), ante un adversario que se quedó con 10 hombres luego de la segunda amarilla a Evan N’Dicka, por cometer la falta en el área.

El club catalán era favorito para conquistar el único trofeo que falta en sus vitrinas. Jugaba por primera vez en la Europa League y jamás ganó su certamen antecesor, la Copa de la UEFA, en la que llegó cuatro veces a semifinales, perdiéndolas todas.

Fráncfort fue monarca de este torneo en 1980, y dejó pactado un duelo ante el West Ham, que se clasificó a las semifinales de una competición europea por primera vez desde 1976, tras eliminar al Lyon por un global de 4-1.