Mónica Trejo, una noqueadora de obstáculos
La boxeadora saltillense ha terminado por superar distintas etapas hasta mantenerse en el profesionalismo.
El boxeo es una disciplina muy practicada a nivel nacional y también a nivel local, la capital coahuilense aún no cuenta con un campeonato mundial de box en sus vitrinas, pero es cuna de grandes nombres boxísticos como lo es el de Mónica Trejo, una boxeadora que se ha encargado de llevar el nombre de la ciudad, el estado y el país en cada una de sus contiendas.
Dicen que, si las cosas fueran sencillas, cualquiera las haría; solo cosecha aquel que persevera. Fue hace diez años cuando el Gimnasio Municipal de Saltillo abrió sus puertas para recibir a una joven de 17 años de edad, una adolescente que aún tenía miedo de recibir golpes y que solo se acercó al boxeo con la intención de mantenerse al cien en temas de estética y de salud.
“Todo fue por la simple intención de querer realizar actividad física, para aprender algo de defensa personal, pero nunca con la idea de subirme a un ring, yo era súper temerosa de los golpes, esto fue algo que se fue dando poco a poco”.
Pasando por una etapa complicada de la adolescencia, antes del boxeo practicó baile, el cual es una de sus grandes pasiones, pero el destino la fue acercando a los encordados y alejando un poco de las pistas. Luego de un año de entrenar e ir perdiendo ciertos miedos, llegó el primer reto para la pugilista; durante el 2013, la mítica Arena Obreros vio el debut amateur de una promesa, aunque lamentablemente cargó con la derrota por decisión dividida.
“Realicé un buen desempeño, mi rival tenía más experiencia que yo y la decisión no fue unánime, en esa función peleó mi hermano y ganó (David Trejo). Recuerdo que me llevé muchos comentarios negativos de familia y amigos, por ejemplo, - ¿para qué te subes? Si vas a perder- o –eso déjaselo a tu hermano- y eso fue lo que más me detonó, dije - ¿me están diciendo que no puedo? Van a ver que sí-, eso cambió mi forma de ver las cosas y seguí peleando con peleadoras de Frontera o Nuevo León, así me fui desarrollando”
Para el 2015, Mónica se convirtió en campeona municipal en las Olimpiadas Municipales, el primero de los tres cetros municipales consecutivos que acumularía. Su alto nivel boxístico hizo eco de inmediato en la ciudad y fue así como obtuvo una beca educativa por parte de la Universidad Autónoma del Noreste (UANE), organismo al que representó en el Campeonato Universitario del 2016.
“Nos fuimos a la Ciudad de México, participaron 32 universidades, participé contra la UNAM y la UANL, llegué hasta la final y trajimos el subcampeonato nacional universitario, eso me impulsó para irme al terreno profesional. Representé a la universidad, aún y cuando no tuve el apoyo de la misma, el hecho de traerme esa medalla significa mucho para mí. Me preparé para la edición del 2017, iba por la de oro, pero no pude participar por temas de apoyo y de recursos, siendo que iba a representar de nuevo a la universidad”.
La decisión más importante la tomó en 2017, cuando confirmó sus intenciones de incursionar en el profesionalismo, el debut llegaría en diciembre de aquel año en la misma ciudad capital.
“Mi entrenador Óscar Soberón me comentó sobre un debut en el profesionalismo, pero antes debía terminar mi carrera (comunicación), él siempre me dijo –prefiero a un amigo profesionista que a un amigo boxeador-. Mi debut fue muy cardiaco, se pospuso dos veces y se dio hasta diciembre en la Arena Pavillon del Norte, salí victoriosa por nocaut”.
Después de triunfar en su debut, la constancia y disciplina se hicieron sus mejores aliados para recibir una segunda victoria en el año del 2018. Las buenas actuaciones de la norteña siguieron dándose y le abrieron las puertas a la escena internacional durante el 2021, cuando enfrentó a la australiana Avril Mathie en Weston, Florida, aunque el resultado no le favoreció.
En agosto del presente año, Trejo tuvo una nueva experiencia fuera del país, enfrentando a Rianna Ríos en el país de las barras y las estrellas, pelea que fue más complicada de lo pensado para la gladiadora azteca.
“Hay que aprender a salir de la zona de confort, fue toda una odisea ese viaje, estuvimos varados en el aeropuerto de Houston, porque había tormenta y no podíamos viajar, sin maletas, ni siquiera pude dormir. Hubo un momento en que mi entrenador me comentó que no era viable seguir, pero yo sentía la responsabilidad de estar en una pelea estelar, creí que me podría cerrar las puertas. Llegamos el jueves por la tarde/noche, desde el martes hasta el viernes fue cuando pude comer bien, era muy complicado por el tema del peso. Fueron muchos factores que me pesaron, no son excusas, pero es importante mencionar lo que no se sabe”
Durante este mismo mes, la boxeadora representará una vez más a México en el plano internacional, se medirá el próximo 12 de noviembre a Shelly Barnett en Chicago, Illinois, Estados Unidos. A diez años de comenzar en el mundo boxístico, la pugilista buscará celebrar la primera década de trayectoria con una victoria internacional.
“Duda de lo que quieras, menos de ti mismo. No puedes dudar de tu trabajo”, Mónica Trejo.