Pensé en todos los mexicanos que han sido insultados: 'obrero' de Torre Trump
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Diego Saúl Reyna confiesa que se hizo pasar por un trabajador del edificio para poder acceder y realizar su protesta; "la bandera se veía preciosa", asegura
El hombre que colocó ayer una bandera de México en lo alto de la Torre Trump de Vancouver, Canadá, lo hizo para reivindicar a todos los mexicanos ante el empresario estadunidense Donald Trump.
Diego Saúl Reyna, cuya imagen ha dado la vuelta al mundo en redes sociales, confesó que, con ayuda de unos amigos, se hizo pasar por un trabajador del edificio para poder acceder y realizar su protesta.
"Llegamos, pusimos la bandera, tomamos la foto, celebramos un poquito, pensamos en todas las personas mexicanas que han sido ofendidas e insultadas, celebramos la simbólica reivindicación de todos los mexicanos que trabajan muy fuertemente, muy honesta y honradamente, y que han sido insultados”, declaró hoy Reyna a la periodista Adela Micha, en entrevista para Grupo Imagen Multimedia.
También dijo que otra de las razones de su acto fue intentar evitar que la sociedad canadiense se contagie del mensaje antimexicano que promueve el precandidato republicano a la Casa Blanca.
"Por eso puse la bandera, porque no quiero que esa infección se venga a esta sociedad tan bonita que es la canadiense”, mencionó
Luego de colocar el lábaro patrio, el mexicano naturalizado canadiense bajó sin ningún problema del edificio.
"Nadie nos vio”, afirmó.
"La bandera se veía preciosa, ondeando con el viento en la parte más alta de la torre”, comentó.
Reyna, originario del estado mexicano de Chiapas, aseguró que no ha recibido ninguna queja al respecto.
"(La respuesta de la gente) Ha sido 99.9% positiva, el uno por ciento que ha sido negativa son los estadunidenses que residen aquí en Canadá”, declaró.
INSPIRACIÓN FUTBOLERA
La idea de colocar la bandera mexicana en la Torre Trump de Vancouver se le ocurrió a Reyna previo al partido de futbol entre las selecciones nacionales de México y Canadá, celebrado el martes pasado en la ciudad canadiense como parte de las eliminatorias para el Mundial de Rusia 2018.
Explicó que una tienda local de productos hispanos estaba vendiendo banderas de México y decidió comprar la más grande que había.
Reyna, quien trabaja en el sector de la construcción, reveló que sus amigos le habían propuesto algunas ideas más radicales, como orinarse en la torre o hacer algún tipo de pinta.
"Yo quería hacer algo que no fuera destructivo o vandálico, porque simplemente validaría las acusaciones de este señor (Donald Trump)”.
"Quise hacer algo creativo pero que a la vez fuese lo suficientemente fuerte para que llegara a su atención”, relató.
Reyna, casado con una canadiense y padre de un niño, dijo que tiene muchos años sin visitar México, pero que espera hacerlo pronto.