La tragedia golpea otra vez a Torreón: ¿era prevenible?
COMPARTIR
TEMAS
A este día ya sabemos lo que ocurrió: una mujer condujo una camioneta y arrolló a un grupo de aficionados de los Rayados de Monterrey. Murió una mujer que viajaba por primera vez a Torreón y nueve personas resultaron lesionadas; cuatro de ellas siguen graves.
Ya sabemos que la Fiscalía de Coahuila intenta imputarla por homicidio calificado con alevosía y ventaja y lesiones dolosas.
TE PUEDE INTERESAR: ¿Es un consejo ciudadano la solución al tema de la deuda?
Será la justicia finalmente la que se encargue de dictar si se trató de algo intencional o no, un asunto que mantuvo a la gente a la expectativa.
Sin embargo, a la espera de la resolución judicial, que bien podría definirse este lunes o esperar varios meses si se decide vincular a la presunta responsable a proceso, está la pregunta: ¿se pudo prevenir?
Primero, tanto directiva del Santos Laguna como autoridades municipales, trataron de desmarcarse con una serie de justificaciones, a mi parecer, injustificadas. El pretexto de que ocurrió 90 minutos después de terminado el encuentro no es ninguna coartada. Menos al punto de declarar, como lo hizo el alcalde Román Cepeda, que hubo “saldo blanco”.
¿Quién define hasta cuándo ya deja de existir responsabilidad?
El punto 7 del Capítulo XII del Protocolo Institucional de Seguridad “Estadio Seguro” de la Liga MX, establece que, como medida preventiva, treinta minutos antes de que finalice el partido, deberá de estar instalado el operativo seguridad para prevenir que aficionados del equipo visitante al salir puedan enfrentar provocaciones o agresiones por parte de aficionados o miembros del grupo de animación local.
Pero nunca se establece que pasado cierto tiempo, las autoridades ya no se hacen responsables. Ni modo que la autoridad diga: ‘después de las 11 me voy a dormir y hagan lo que quieran’. Pues no. Termina hasta que termina. Y en las inmediaciones del estadio había un grupo de aficionados del equipo visitante esperando por su transporte.
Esto nos lleva a otra pregunta. El grupo de aficionados ¿era o no un grupo de animación? La Liga MX tiene prohibidos los “grupos de animación” visitantes, pero no tiene prohibido el ingreso de aficionados del equipo visitante.
El Capítulo III del Protocolo “Estadio Seguro” habla de la Coordinación con las Instituciones de Seguridad Pública y Protección Civil y en él se establece que debe existir un “Acompañamiento de los aficionados visitantes por agentes de seguridad desde algún lugar cercano al Estadio y/o desde su ingreso a la ciudad sede del partido de fútbol”.
Todas las sedes deberán contar con por lo menos 3 anillos de seguridad. El primer anillo de seguridad en la entrada de la ciudad, principalmente en las carreteras por donde arriban los Grupos de Animación y/o aficionados visitantes.
Ciertamente el protocolo no especifica cuándo termina ese “Acompañamiento”. Pero la lógica debe imperar.
En el Capítulo VII Protocolo de Actuación se establece un Plan Operativo y entre sus objetivos está un “dispositivo exterior del estadio”.
Por eso la pregunta es pertinente: ¿un dispositivo de seguridad tiene vigencia de horario?
Además, supuestamente el grupo que acompañaba a la presunta responsable es parte de un grupo de animación local y el capítulo IX en su punto 5 establece que “la seguridad de los grupos de animación en lo referente a su conducción, resguardo y control, en el exterior y dentro de los estadios, antes, durante y después del partido, corresponderá de manera directa a las instituciones de seguridad pública”.
AL TIRO
Por más que las autoridades se quieran excusar, esto no es posible. No es posible porque había un grupo de aficionados del equipo rival que todavía no se retiraba del estadio. Si se llevó a cabo el anillo de seguridad como lo indica el protocolo, este grupo o transporte tuvo que haber sido identificado.
Y si estaba identificado no pudo haber sido dejado a su suerte, así hayan pasado 20, 30 60, 90 ó 200 minutos después de concluir el encuentro. No cuando existen antecedentes de violencia.
¿Era prevenible? Por supuesto, y no solo por el tema de protocolo. Sino también por otros asuntos que tienen que ser puestos sobre la mesa como la venta sin control del alcohol dentro del estadio.
Y por supuesto, la propia responsabilidad de la presunta autora material.