Realidades de la Liga MX
COMPARTIR
TEMAS
De nuevo se nos dejaron ir en avalancha todas las críticas para el cuerpo arbitral, por generar caos y más caos, pero —como saben— a mí no me gusta el tema de los silbantes, porque se me hacen malísimos casi siempre.
Como humanos, cometen errores, y —además— aún no saben usar el videoarbitraje; en gran medida, por la grilla que se traen.
Por eso, es oportuno dimensionar algunas de nuestras realidades en la Liga MX:
Pumas. Es cierto que las figuras han removido las entrañas en el vestuario de Andrés Lillini y, después de la goleada en Barcelona —que fue humillante, cuando creían que sería una gran experiencia— regresaron a México para sufrir con la tremenda superioridad del odiado rival, que fue a ganarles en casa 3-0 y puso a todo mundo en Ciudad Universitaria a temblar.
La inversión que se hizo fue grande para los resultados obtenidos. Así que se ponen las pilas con todo y Dani Alves o les saldrá el tiro por la culata.
Chivas. Después del montaje de los jugadores dizque arrepentidos y regalando una taquilla, creyeron que obtendrían mejores reacciones, pero la verdad es que ya ningún chivahermano cree en ellos. Así de simple.
Los resultados son los que hablarán en este proyecto fallido, que tiene al Guadalajara de nuevo en los últimos lugares, con ocho juegos sin ganar, y no se ve para cuándo.
Cruz Azul. Vaya martirio por el que pasa el equipo del urguayo Diego Aguirre, que se ha desprendido de la inercia que llegó a darle Juan Reynoso a La Máquina.
No pita, pero —además— no se sabe a dónde quiere ir.
Sin alma, con mucha frustración y con pocas acciones para entender qué se quiere con uno de los grandes de México y que ilusionó a sus aficionados con el despertar hace apenas un par de años.
Hoy, se ve muy lejos que vuelvan ser protagonistas. Hoy, Pumas está en lugar 13, Cruz Azul en el 15 y Chivas en el 17. Los tres deberían estar al menos pelando por los puestos del mentado repechaje de 12 clubes.
Si siguen con esta inercia, estamos ante unos de los grandes ridículos de los equipos grandes, que han perdido su estirpe poco a poco y también su popularidad, sobre todo con las nuevas generaciones.
¡Bienvenidos, bienvenidos! A las realidades de nuestra Liga MX.