¿Seguirán los abrazos a quienes dan balazos?
Aburrida, desganada y apática luce Claudia Sheinbaum en cada evento al que le da la gana asistir. Todo lo contrario puede decirse de Xóchitl Gálvez, quien no elude ningún tema, que no rehúye a cada invitación, y que se enfrenta a audiencias que no siempre la favorecen.
Muy poco hemos sabido de la estrategia de seguridad pública de la candidata morenista. La única novedad es que todo seguirá igual con respecto a la fallida política obradorista de “abrazos y no balazos”. De hecho, en el evento en el que los candidatos presidenciales firmaron un “Compromiso Nacional por la Paz”, organizado por la Conferencia del Episcopado Mexicano, Sheinbaum criticó el diagnóstico elaborado por los obispos sobre la violencia en nuestro país: “No comparto la evaluación pesimista del momento actual. Tampoco coincido con la visión de que prevalecen el miedo, la impotencia, la desconfianza y la incertidumbre. Tampoco estoy de acuerdo con las referencias a una supuesta militarización o militarismo en el país”.
TE PUEDE INTERESAR: Cuidado al medio ambiente es una labor de todos
Sin embargo, a fuerza de defender la estrategia de seguridad pública adoptada por su titiritero, Claudia Sheinbaum recurre a las mismas mentiras y a los mismos otros datos que una y otra vez el presidente adoptó como medio para eludir su responsabilidad de brindar a los mexicanos una vida sin miedo.
Parece mentira que tuvo que venir una diputada española para hablar fuerte y claro sobre la estrategia de seguridad de la 4T. Ante un grupo nutrido de jóvenes, Cayetana Álvarez de Toledo dijo: “Voy a hablarles con claridad porque las circunstancias creo que lo exigen. México, este país formidable, esta nación admirable, esta potencia económica y cultural impresionante está siendo tomado por el crimen organizado, por la complacencia de quienes debieran defenderlo. ‘Abrazos no balazos’ o más bien ‘abrazos a los que dan balazos’, es un eslogan bonito, pero el resultado es catastrófico, catastrófico con la democracia y sobre todo, para los jóvenes, miles de jóvenes mexicanos están matando y muriendo [...] y esto no es responsabilidad sólo de los criminales, también lo es principalmente de quienes gobiernan y aplican las políticas de seguridad [...] Llaman política del abrazo a lo que no es más que una mezcla letal, debo decir, de incapacidad y connivencia y además dicen que no hay alternativa y yo quiero decir que sí la hay”.
Quien también ha hablado fuerte y claro sobre el tema de inseguridad es Xóchitl Gálvez, quien tuvo el gran acierto de invitar al diputado y exgobernador coahuilense, Rubén Moreira Valdez, como su asesor en temas del combate a la delincuencia organizada.
Al llegar a la gubernatura Rubén Moreira también habló fuerte y claro sobre la inseguridad reinante en regiones coahuilenses como en La Laguna, en Monclova y otras ciudades de la Región Centro, y en la Región Norte, principalmente. Cuando dijo su recordada frase “¡De la seguridad me encargo yo!”, pocos creyeron que sus palabras estarían acompañadas por acciones. Y vaya que se encargó de traer paz a Coahuila con una estrategia que se dividió en grandes aciertos. En primer lugar, logró establecer un cuerpo policíaco de élite que, junto con el Ejército Nacional y la Marina de México, entablaron las estrategias en el combate de los grupos del narcotráfico que por entonces se peleaban el territorio estatal. Además de golpear a la delincuencia organizada con un ataque frontal y valiente por parte de las fuerzas del orden, le pegó en lo económico a los grupos delictivos. Por si fuera poco, estudió las zonas más conflictivas de todas las ciudades de Coahuila, e instaló en esos lugares bibliotecas, canchas deportivas y parques con juegos infantiles, además coordinó a todas las áreas de gobierno para trabajar conjuntamente en dichos polígonos de inseguridad.
Todas estas acciones y más todavía, fueron determinantes para lograr que Coahuila sea hoy una de las entidades más seguras del país. Y todo ello gracias a la valentía del exgobernador Moreira Valdez, quien hoy colabora con la candidata presidencial Xóchitl Gálvez a delinear un plan detallado y realizable para que regresen los tiempos de paz a nuestro país.
Pocos saben de la lucha al narcotráfico y del respeto a los derechos humanos como Rubén Moreira y eso quedó demostrado en su encuentro televisivo con Arturo Zaldívar Lelo de Larrea. Con argumentos sólidos y con un diagnóstico certero de la situación actual, el diputado federal prácticamente barrió con las tibias intervenciones del exministro y ahora asesor de Claudia Sheinbaum.
Muy a pesar de quienes queremos la derrota electoral de la 4T, sé que es difícil que Xóchitl Gálvez llegue a la presidencia de México debido a que no sólo se enfrenta a Claudia Sheinbaum, sino también a un estado poderoso y a las bandas criminales que día a día se encargan de sembrar el miedo en la mayor parte del país. Sin embargo, colaboraciones como la de Rubén Moreira hacen que recobremos la confianza del triunfo de la hidalguense y la esperanza de vivir en un México mejor y más seguro.
aquientrenosvanguardia@gmail.com