Solidarios con Heath Ledger

La idea era aprovechar que en la historia se hablaba de un espejo mágico que permitía viajar a los personajes a través del tiempo, para justificar que los tres aparecieran interpretando en diferentes momentos al estafador que Ledger encarnó.

Pero además de entrar al quite para resolver el problema de la actuación de Ledger, los actores decidieron donar íntegros sus sueldos para solventar los gastos de Matilda, la hija que Heath tuvo con la actriz Michelle Williams, debido a que éste no actualizó su testamento y dejó como único beneficiario a su padre, Kim Ledger.

"Los tres fueron muy generosos al hacer eso. Es poco común que, además de sacar adelante el proyecto, hayan decidido donar sus sueldos a la hija. Realmente fue un gesto extraordinario y ser parte de un proyecto donde reinó la amistad y la solidaridad, me hizo sentir muy honrado y satisfecho" declaró Terry Gilliam al diario The Sun.

Incluso, el director de Tideland y Doce monos decidió dedicarle la cinta a Ledger a través de una leyenda en la que se lee "Ésta es una película de los amigos de Heath Ledger". La primera vez que el público pudo leer dicha dedicatoria fue en el marco de la 62 edición del Festival de Cine de Cannes, donde el cineasta presentó su más reciente trabajo fuera de competencia.

Cabe destacar que la revista Variety publicó, días después de la muerte del australiano, que Gilliam obtuvo el financiamiento para El imaginario mundo del Doctor Parnassus, que se estrena hoy en México, debido a que Ledger era garantía en taquilla para los productores.

Mucho se ha hablado de la mala racha que ha acompañado a Terry Gilliam a lo largo de su vida, ya que además de enfrentar la muerte de Heath Ledger, tuvo que lidiar con la cancelación de del rodaje de The Man Who Killed Don Quixote justo dos días después de que comenzó a filmar en España debido a que su protagonista, el veterano comediante francés Jean Rochefort, enfermó gravemente y los médicos le prohibieron, entre otras cosas, montar a caballo, actividad básica para desempeñar el papel de Don Quijote.

Gilliam tuvo que detener la película y decirle a Johnny Depp y Vanessa Paradis, actores originales de la cinta, que retomaría después el proyecto. El también director de Los hermanos Grimm vio frustrado el rodaje del filme, no obstante trató de verle el lado amable a la situación y realizó un documental titulado Lost in La Mancha en el que narró las desventuras que vivió la producción con esta película sin realizar.

A nueve años de distancia, el director estadunidense anunció que retomará The Man Who Killed Don Quixote teniendo como protagónico a Robert Duvall. Debido a compromisos previos Depp no estará en esta historia, que tendrá un presupuesto de 100 millones de dólares.