‘A los 13 años tuve un accidente alcohólico’: Reyli Barba recuerda lo que sufrió por sus adicciones
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El autor de ‘Amor del bueno’ confesó que comenzó a beber desde muy pequeño y con el éxito de Elefante su alcoholismo fue en aumento
En entrevista con Yordi Rosado, el cantante Reyli Barba, contó en el popular programa sobre su vida, sus adicciones, la muerte de su padre y también sobre la historia de Elefante, una de las bandas mexicanas de rock más populares, la cual abandonó en 2003 para emprender su carrera como solista.
El cantante de 50 años reflexionó sobre su alcoholismo y los miedos que enfrentó para salir de él: “La verdad es que yo tenía mucho miedo de poder seguir escribiendo sin beber, yo decía: ‘si no paro de beber, no paro de escribir, y cuando no escribo es porque estoy sediento’, el alcohol es muy cabr*n, mi hermano, el alcohol es bien seductor y deja triste a la gente, a la familia”, dijo.
El intérprete de “Durmiendo con la luna” recordó que con el éxito de Elefante comenzó a “cargar culpas” y compromisos para los que no estaba preparado, en los primeros años de gira vivió prácticamente en un autobús. Las “fiestas fuertes” era el pan de cada día, o mejor dicho de cada noche.
Sin embargo, esto no era algo nuevo para él pues desde adolescente tuvo problemas con las adicciones y comenzó a beber a los 11 años, debido a que en el pueblo en el que nació, Juarez, Chiapas, tomar alcohol desde temprana edad era bastante común.
“En las comunidades pequeñas esto de que los chamacos empiecen a beber desde temprano es muy común. Pero la fiesta fuerte comenzó cuando llega el éxito y las cuentas de banco ahora sí tienen para pagar. Yo tomaba de todo, [las crudas] siempre morales, las físicas no las sentía porque a los 13 años tuve un accidente alcohólico, me tomé casi 3/4 de Presidente en una apuesta con “El Chelito” y otro amigo, azoté contra el cofre de un carro y me tuvieron que pasar tres sueros para revivirme”, confesó.
Igualmente, relató como su hijo, a los 14 años, tuvo que asumir la responsabilidad de llevarlo a una clínica de rehabilitación. “Yo me porté mal, o sea, yo acabé casi conmigo, pero a él (su hijo) lo cuidé siempre y él me cuidó, él me llevaba a los internamientos. Él con 14 años fue y me metió al internamiento”, mencionó el autor de “Amor del bueno”.