Spider-Man: El día que Tom Holland llevo a la filmación al niño que salvó a su hermana de ataque de perro
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Después de ser mordido varias veces en la cara y en la cabeza, “tomó la mano de su hermana y corrió con ella para mantenerla a salvo”
Tom Holland convivió durante el rodaje de Spider-Man:No Way Home con Bridger Walker, que en 2020 salvó a su herman de ataque de un perro.
Holland dejó que el ahora niño de 7 años se probara la máscara de Spider-Man y juntos hicieron la mejor pose.
También Bridger y Holland volaron por los aires, gracias a la ayuda de un arnés.
Así mismo, Chris Evans le regaló un escudo del Capitán América, tras hacerse viral la historia del niño, que ariesgó su vida para salvar a su hermana del ataque de un perro.
Chris Evans saludó a Bridget Walker, quien tenía 90 puntos en su rostro tras el ataque del animal.
Capitán América aquí, leí tu historia, vi lo que hiciste y estoy seguro de que escuchaste mucho de esto en los últimos días, pero déjame ser el próximo en decirte, amigo, eres un héroe, lo que hiciste fue tan valiente, tan desinteresado, tu hermana es tan afortunada de tenerte como hermano mayor.
“Tus padres deben estar muy orgullosos de ti “, continúa diciendo el actor en un mensaje de video publicado en una página de Instagram. “Voy a localizar tu dirección y te enviaré un auténtico escudo del Capitán América porque amigo, te lo mereces”.
A través de redes sociales, la tía del menor, identificada como Nicole Walker, realizó una publicación donde relató la historia y destacó la valentía de Birdger y lo describió como un héroe.
De acuerdo a la publicación, el hecho ocurrió el 9 de julio de 2020, en Wyoming, Estados Unidos, cuando los dos niños se encontraban jugando.
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Durante un momento del juego, el perro se acercó a la zona donde se encontraban, por lo que Bridger decidió colocarse entre el can y su hermana con el objetivo de defenderla en caso de que éste los atacara, hecho que sucedió.
Agregó que después de ser mordido varias veces en la cara y en la cabeza, “tomó la mano de su hermana y corrió con ella para mantenerla a salvo”.
Después del ataque, la familia quedó sorprendida con las palabras del niño de 6 años: “Si alguien tenía que morir, debía ser yo”.
La tía del pequeño Bridger contó que las heridas fueron grandes y que cirujano plástico tuvo que ponerle unos 90 puntos en la cara, principalmente en la mejilla izquierda, y estuvo a pocos centímetros de perder el ojo.
