Discos SSD, rápidos, robustos y caros

Múnich, Alemania.- Los discos duros comunes giran. Sus partes deben moverse para permitir que los cabezales magnéticos puedan leer o grabar nuevos datos en los discos magnéticos. Esta tecnología se adapta bien a las computadoras, que no suelen moverse demasiado.

Por el contrario, los smartphones y los reproductores MP3 están sujetos a movimiento permanente. Estos accesorios móviles suelen estar provistos de chips de almacenamiento digital conocidos como memorias flash. Si se une varios de estos bloques de memoria mediante un controlador de interfaz, se tiene un disco de estado sólido, conocido por la abreviatura SSD.

Los discos SSD se están utilizando cada vez más en las computadoras. Aunque la tendencia favorece sobre todo a las portátiles, los discos SSD suelen hallarse también en PCs. No obstante, los SSD suelen ser mucho más caros que un disco duro normal. Un disco SSD relativamente pequeño, de 128 gigabytes de capacidad, puede costar alrededor de 200 dólares.

Sin embargo, "los discos SSD están siendo mejorados aún desde el punto de vista tecnológico", señala Thomas Mikolajick, docente en materiales nanoeléctricos de la Universidad Técnica de Dresden. La densidad de datos en los chips ha crecido constantemente en los últimos años.

A mayor densidad de datos, mayor es la cantidad de datos que caben en un chip de memoria, lo que, a su vez, implica un descenso en los precios. "Para niveles de capacidad de alta gama, las memorias SSD siguen siendo caras", apunta el especialista. Actualmente es posible hallar discos duros normales de un terabyte de capacidad (1.000 gigabytes) por hasta 60 dólares.

Otro problema con las memorias SSD es su vida útil. Tras varios miles de ciclos de grabación, los componentes individuales pierden su capacidad para almacenar nuevos datos. "Pero los datos ya almacenados siguen siendo accesibles", dice Mikolajick, "y los controladores del disco duro están programados para escribir en los componentes individuales de la forma más uniforme posible". No obstante, los discos SSD no están sometidos a desgaste mecánico como las partes móviles de los discos duros normales.

La ventaja principal de las memorias SSD es su alta velocidad, beneficio que no obstante tiene sus salvedades. Una memoria SSD es más veloz si lo que se necesita es acceso a varios archivos al mismo tiempo. Esto concuerda con las experiencias de Christian  Vilsbeck, que sometió varios discos SSD a prueba para el portal Tecchannel.de. "Si estoy trabajando al mismo tiempo con varios programas de uso intensivo de recursos, el SSD reacciona muy rápido", dice. "Simplemente da al trabajo una sensación más flúida".

No obstante, Vilsbeck contempla otro factor aún más importante que la velocidad: el ruido. En una memoria SSD no hay partes móviles y por tanto no hay ruido por rotación o acceso. "Un laptop con un disco SSD es más silencioso y el disco duro genera menos calor", señala. Esto quiere decir que los ventiladorestienen menos trabajo, lo que hace que la computadora sea más placentera de usar. Los discos SSD son además más robustos y pueden sobrevivir pequeñas caídas.

En suma, los discos duros SSD son la solución ideal para aparatos móviles. Al comprar un laptop o un netbook, la diferencia en cuanto al precio tampoco es demasiado grande. Se puede hallar discos duros de hasta 256 gigabytes por entre 100 y 150 dólares.

Sin embargo, para computadoras de escritorio, los SSD siguen siendo un producto de lujo. Aunque es fundamentalmente posible instalar un disco SSD junto a un disco duro magnético. Pero esto no parece tener mucho sentido: "Los beneficios de la velocidad y el volumen se pierden en gran parte", dice Vilsbeck.

Pero ha aparecido en el comercio una nueva generación de discos duros llamados híbridos, que combinan discos normales de almacenamiento magnético con una pequeña cantidad de memoria flash. El disco duro pone entonces programas de uso frecuente en el sector SSD para acelerar el proceso.

"Los discos híbridos siguen siendo un producto nicho", señala Rudolf Aunkofer, del grupo alemán de investigaciones de mercado GfK. Lo mismo puede aplicarse a los discos SSD, cuya parte del mercado es de apenas el tres por ciento, según estudios de GfK, aunque Aunkofer cree que esto va a cambiar, pues "el mercado para laptops y minicomputadoras está creciendo". Y, al tiempo que crece el volumen de mercado de memorias SSD, los precios van a bajar. Dentro de uno o dos años, según el especialista.