El artista expone esta serie de pinturas en Oniria donde explora el concepto de los ‘personajes trompo’ mientras que hace un homenaje a los textos de ‘El llano en llamas’
En una amena charla, postrado en una silla y con el interés de más de una decena de personas, comenzó: 'A Rulfo lo conocí en Chiapas cuando tenía 34 años'...
Su primera obra publicada en forma de libro fue en el Fondo de Cultura Económica (FCE), casa editorial bajo la cual en 1953 apareció "El llano en llamas", con 15 cuentos.
El lingüista e investigador dijo que vale la pena rescatar que por primera vez después de muchos años, se logró traducir esta gran obra de Juan Rulfo a esta lengua mexicana.
Recordó que la obra del autor originario de Sayula, tiene una permanente novedad no sólo por sus logros estéticos; sino porque no ha existido nunca un campesino en la vida real que haya hablado realmente como un personaje de Rulfo.
Conmemorando el centenario de Juan Rulfo, nuestro colaborador Javier Treviño desentraña la onírica sensualidad que el autor imprimió en sus dos principales obras: ‘Pedro Paramo’ y ‘El llano en llamas”
La serie, que aborda aspectos inéditos de su vida personal y familiar y hace un recorrido por su obra literaria, sus adaptaciones cinematográficas y la faceta de fotógrafo de Juan Rulfo (1917-1986).
Severiano Pérez Rulfo describe a su tío como un hombre con mucho humor, que gustaba de hacerle bromas cuando convivían en su casa de Tonaya, un municipio al sur de Jalisco donde se asentó parte de su familia.
La edición, publicada por la editorial RM y enmarcada en el centenario del natalicio del escritor mexicano (1917-1986), presenta junto al texto original la traducción del lingüista y profesor Victoriano de la Cruz.