Renueva tu look para ir a la oficina
Nuestra imagen en la oficina dice mucho de nosotras mismas, pero también de cómo nos ven los demás y cómo sentirnos respetados como profesionales
MADRID.- Si se abren nuevas expectativas de trabajo o advertimos que, quizá, nuestra imagen en el trabajo necesita una revisión, es el momento de poner manos a la obra y analizar qué nos ponemos y qué transmite nuestra actitud a través de nuestro vestuario.
MÁS ALLÁ DE LA ROPA
A menudo, cuando pensamos en imagen nos limitamos sólo a la ropa, sin embargo, hay otros factores que deberíamos tener en cuenta e invertir en ellos para mejorarla.
La especialista indica que deberíamos reflexionar sobre cómo es nuestra imagen digital y si es coherente con la real, o bien si podríamos mejorar nuestra forma de hablar en público, otro aspecto que condiciona la visión que los demás tienen hacia nosotros.
La experta, editora del portal Working Outfits, apuesta por aprovechar los descuentos y señala que las rebajas “son el momento perfecto para invertir en prendas de calidad de fondo de armario, un buen abrigo, un traje sastre, un vestido de negocios, una bonita blusa o unos zapatos “stilettos””, comenta.
“Hay que apostar por marcas más premium, que suelen tener buenos precios en esos momentos, además de “picar” en algún capricho de moda que nos ayude a incorporarla a la oficina. Esta temporada no hay que olvidar el terciopelo, el estilo lencero, militar o los lunares”, advierte.
PROFESIONALIDAD Y FIABILIDAD
Rebeca Ávila es especialista en definir el estilo de una mujer profesional y considera que en el ambiente laboral la imagen debe ayudar a transmitir un mensaje de “profesionalidad, fiabilidad y preparación para el puesto”.
La especialista explica que está demostrado que, trabajar a diario la imagen, es una forma de conocerse mejor y de fomentar la confianza y seguridad en uno mismo, “valores muy importantes en el entorno profesional”.
“La clave está en conseguir que nuestro look transmita nuestro estilo personal. Las personas seguras de sí mismas y con aplomo, son personas que trabajan muchísimo su imagen”, advierte la experta.
UN ESTILO PARA CADA OCASIÓN PROFESIONAL
Indica que hay que saber elegir un estilo determinado para cada ocasión profesional, aunque considera que un vestido es la prenda “fetiche” que toda mujer debería tener en su armario por su versatilidad y adaptación a su estilo de vida”.
Asegura que es la prenda femenina por excelencia que permite a la mujer profesional alejarse del código masculino.
“La mujer está perdiendo el miedo a llevar su feminidad a la esfera corporativa. ¿Quién dijo que sea incompatible con la profesionalidad?”, enfatiza Ávila.
UN VESTIDO PARA CADA MUJER
“Hay un vestido para cada mujer”, dice con seguridad Rebeca Ávila, quien añade que la versatilidad de los vestidos permite construir un “look” formal e informal “en función de los complementos, perfecto para jornadas ‘non-stop”.
“Con bailarinas y accesorios se puede con formar un “look” discreto para el día y, combinado con sandalias y maxi-accesorios, es perfecto para la noche”, apunta.
Ávila considera una blazer un “must” del armario, “una de las prendas más versátiles para la mujer profesional”, pues indica que ayuda a transmitir profesionalidad, formalidad y seriedad, “valores muy importantes en los entornos de trabajo, además admiten múltiples combinaciones: con pantalones de pinza, faldas, vestidos o vaqueros para restar informalidad al outfit”, asevera.
“Comprar una blazer es una inversión, nunca pasan de moda y se pueden utilizar una y otra vez para ir al trabajo”, admite Rebeca Ávila.
Los colores básicos que recomienda tener en el armario son: negro, blanco y azul marino y, si ya forman parte de él, “nunca está de más introducir blazer de otros colores, incluso estampados”.
Considera que los tacones son “imprescindibles” en determinados momentos profesionales como presentaciones, conferencias o eventos importantes. “No olvidemos lo que decía Marilyn Monroe: “Dale a una mujer los zapatos adecuados y conquistará el mundo”, agrega.
En una entrevista de trabajo recomienda vestir “de acuerdo al estilo personal”, adaptando en lo posible el estilo al tipo de empresa o sector.
La editora del portal Working Outfits describe como estilismo infalible: una blusa bonita en blanco, pantalón de pinzas azul marino o un vestido en este mismo tono. Precisamente este color, así como el gris y el marrón, son los que considera como colores estrella en este tipo de entrevistas.
Aconseja también no recargarse con complementos que distraigan la atención, “no es bueno demasiada joyería”.
“La cara siempre despejada. El cabello es determinante. Y lo mejor es optar por un maquillaje natural que aporte un efecto ‘buena cara”, insiste.
“Lo mejor es actuar con naturalidad concentrándose en los puntos fuertes, transmitiendo los valores que se pueden aportar a la empresa”, señala Ávila.