¿Buscas un coche que no contamine?, checa los tipos que hay y su comparación
La carrera por mejorar la tecnología automotriz se incrementa con los diferentes vehículos cero contaminantes
Por MARIO TIXCE para MotoryRacing
La tecnología sigue sin parar y el sector automotriz no es la excepción. A diario se mencionan tantos avances que buscan optimizar la vida de las personas en el mundo, reduciendo costos, minimizando esfuerzos, pero sobre todo, eliminando la contaminación ambiental que tanto afecta a nuestro planeta tierra. Las grandes marcas fabricantes de coches no escatiman ni esfuerzos ni dinero en pro de adelantarse a los acontecimientos, de hecho, hasta podemos agregar que se ha convertido en una especie de competencia por saber quién es más poderoso que quién, y cuán lejos se puede llegar cuando no existen límites y se dispone de amplia creatividad y ganas de trabajar.
Sin lugar a dudas, el boom de la década tiene que ver con los avances en la tecnología eléctrica; y es que no podía ser de otra, sobre todo si tomamos en cuenta la descomposición del clima en muchas zonas del planeta, y el sobrecalentamiento global qua ha traído consecuencias nefastas. Aunque los coches eléctricos, o con tecnología eléctrica no son nuevos debemos agregar que es ahora que se le da mayor importancia, inclusive se comenzó con los vehículos con tecnología híbrida (a gasolina y eléctricos) a manera de ir acostumbrando al consumidor a lo que se viene en un futuro cercano.
Los híbridos
Desde luego que, cuando pensamos en cada modelo nos preguntamos sobre las diferencias, ventajas y desventajas de cada cual, porque de hecho dependen de los diferentes sistemas que hacen posible su funcionamiento. Sin embargo, al ser del tipo "Ecológico" ya obtenemos la primera ventaja, a saber, que no son contaminantes. El costo y el comportamiento de los diferentes coches son totalmente distintos; tenemos por ejemplo, los modelos "Híbridos", aquellos que cuentan con dos motores, es decir, uno a gasolina y el otro a combustible. Estos coches son considerados el inicio a la era eléctrica, y muchos expertos en tecnología automotriz opinan que son el primer paso a la electrificación mundial de los coches. Estos vehículos se impulsan con su motor a gasolina, pero si se quedan sin combustible, pueden accionar el motor eléctrico y con él rodar por lo menos unos 50 kilómetros, algo realmente útil si tomamos en cuenta que con esa distancia podríamos conseguir una estación de gasolina.
Coches eléctricos
El segundo caso de gran importancia tiene que ver con los coches completamente eléctricos, los vehículos del futuro. Durante muchos años hubo una especie de tabú en lo que concierne a su fabricación y puesta en escena, pero con el pasar de los años han tomado un segundo empuje y ya se vislumbran como los sucesores de los motores a combustión (gasolina o diésel). Estos coches tienen un motor eléctrico, cero contaminantes, y dependen principalmente de su batería. Aunque todo parece perfecto en el fondo no lo es, ya que los tiempos para recargar las baterías siguen siendo bastante altos. Otro de los aspectos tiene que ver con la autonomía, o el tiempo de duración de estas baterías; si bien es cierto que la autonomía ha mejorado notablemente, la comparación con respecto a un coche a combustión sigue siendo abismal. Sin embargo, no todo es negativo, ya que se prevé que para los próximos dos años estos inconvenientes queden resueltos y se pueda recargar de manera rápida y se extienda la duración de las baterías a full carga.
Vehículos eléctricos de pilas de hidrógeno
El tercero de los casos que mencionaremos en este artículo le corresponde a los coches impulsados por hidrógeno. Esta sustancia se convirtió en otro combustible alternativo a los ya conocidos, ya que es amigable con el medio ambiente. Esta clase de vehículos dependen principalmente de la llamada "Pila de Hidrógeno", inclusive, muchos aseguran que su funcionamiento es igual al de los coches eléctricos, con la salvedad de cómo consiguen la energía para impulsarse; en ese sentido, vale mencionar que lo hacen gracias a la batería o pila de hidrógeno, de hecho, hasta el motor que mueve las ruedas es completamente eléctrico, casi que igual a los usados por los modelos eléctricos en si. El nombre, o la manera correcta de identificarlos es "vehículos eléctricos de pilas de hidrógeno", y no como decíamos al principio, "coches de hidrógeno o similares".
Las pilas de hidrógeno, como su nombre lo dice, se recargan con hidrógeno. El hidrógeno que se va consuminendo forma agua que no se vuelve a reutilizar y se desecha. Este sería el principal agente que expulsa la batería, y como vemos es agua, es decir, no es contaminante. Cuando la pila se descarga es necesario acudir a una estación de servició especialmente diseñada para tal fin a recargar, y se hace casi que igual a los coches a combustible, con una manguera, solo que la boquilla es totalmente distinta. El tiempo de la recarga es corto, y pueden pasar de 3 a 5 minutos para encender el vehículo y arrancar nuevamente. Esto convierte al vehículo eléctrico de pila de hidrógeno en una verdadera opción a tomar en cuenta ya que primero, no es contaminante, y segundo, el tiempo de recarga es casi similar al de un coche a combustión.
Comparaciones monetarias
Cuando caemos en cifras nos daremos cuenta de que los coches eléctricos de pila de hidrógeno son más costosos incluso que los mismos coches eléctricos, sin embargo, ofrecen una ventaja mayor porque su autonomía en muchos casos está calculada en 1000 kilómetros. El hidrógeno es más costoso que la gasolina o el diésel.
Conclusiones
En conclusión, estos son los tipos más populares en lo que respecta a coches no contaminantes, con sus principales diferencias. A la larga serán los del tipo eléctrico quienes dominarán el mundo, así como lo han hecho por muchas décadas los impulsados a combustión. De su gusto y su bolsillo dependerá el coche que obtenga, pero recuerde que a la hora de comprar lo más importante será adquirir un coche que sea amigable con nuestro querido planeta tierra.
Fuente: MotoryRacing