Capta México 5,500 mdd en IED automotriz 2015

Dinero
/ 30 marzo 2016

Del 2008 al 2015, México captó flujos de IED por 23 mil 523 mdd en la producción de autos, camiones, autopartes, carrocerías y remolques

CDMX.- México captó 5.558 millones de dólares de Inversión Extranjera Directa (IED) en el sector automotriz en 2015, un alza interanual de 36.3% y máximo histórico.

El monto se integró por 3 mil 260 mdd en autopartes, 2 mil 519 mdd en el ensamble de automóviles y camiones y 79 mdd en la producción de carrocerías y remolques. En los tres rubros se rompió récord, según datos de la Secretaría de Economía.

Este desfase explica por qué en 2015 las autopartes lideraron el sector. Desde 2012, Audi, Nissan-Daimler, BMW, Kia Motors y Toyota anunciaron nuevas plantas de armado de autos en México.

“En la medida que han llegado más fabricantes de equipos originales a México, se ha tenido el efecto de potenciar a todo el sector automotor”, dijo Armando Soto, presidente de la consultoría Kaso y Asociados.

Del 2008 al 2015, México captó flujos de IED por 23 mil 523 mdd en la producción de autos, camiones, autopartes, carrocerías y remolques, con una tendencia de crecimiento, año con año, desde el 2012.

“México atraviesa uno de los periodos de expansión más importantes en la historia de la industria automotriz”, destacó Ildefonso Guajardo, secretario de Economía.

Si bien México ha logrado posicionarse como un jugador relevante en el sector automotriz mundial, el reto que enfrenta se encuentra hacia adelante.

Valentín Mendoza, analista de Banorte, dijo que México tiene la presión de competir directamente con armadoras en EU y Canadá, así como la necesidad de adaptarse a los procesos y tecnologías para cumplir con las nuevas regulaciones y requerimientos de los clientes; pero especialmente, fortalecer su capacidad de innovación y desarrollo de nuevos procesos y tecnologías.

Ricardo Páez, director del Mainforum, dijo que hay cuatro macro tendencias automotrices a nivel global: las nuevas regulaciones en materia de emisiones y eficiencia en el consumo de combustible; los avances tecnológicos y la seguridad cibernética en los automóviles; las concentraciones demográficas y megaciudades, y los cambios en el comportamiento del consumo de automóviles. 

Con información de América Economía

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