Niños felices y exitosos en 8 pasos
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Criar niños ya es una tarea difícil, y criar niños exitosos lo es aún más. Pero todo lo que hagas con amor y pensando en el bienestar físico y emocional de tu hijo rendirá sus frutos
Cuando hablamos de éxito, la mayoría de las personas piensa en el éxito económico y financiero. Pero el éxito en la vida va mucho más allá de lo material. Y cuando decimos que queremos que nuestros hijos sean exitosos, pretendemos que además de no pasar problemas financieros en su vida adulta, sean felices, que hagan lo que les guste, que sean amados, que tengan valores, y sobre todo crezcan emocionalmente sanos.
El futuro de un niño depende en gran parte de cómo fue criado y de las experiencias vividas en su infancia. Cuando somos padres criamos a nuestros hijos con la convicción de hacerlos personas de bien en un futuro, y con el objetivo de enseñarle todo lo que necesitan para su vida.
Si buscas que tu hijo logre sus metas, crezca con buenos valores, y logre día a día superarse a sí mismo, llegando a ser un adulto autónomo y seguro de sí mismo, hay ciertas cosas que debes hacer.
1. Limita el tiempo frente a la pantalla: Parece bastante difícil en los tiempos que corren, pero hay una fundamentación sólida para evitar que los pequeños pasen demasiado tiempo con la tecnología, y es que sus cerebros se alteran, impidiendo el desarrollo de algunas habilidades cognitivas, además de alterarlos en su totalidad. La Asociación Americana de Pediatría recomienda que los bebés menores de 18 meses no deberían siquiera exponerse a la pantalla, mientras que para los niños de 2 a 5 años el máximo recomendado es una hora diaria.
2. Cenen en familia: En mi casa tenemos el televisor en la sala, y no en el comedor como muchas familias amigas. Lo cierto es que, aunque mi hija me preguntó por qué no tenemos televisor frente a la mesa cuando cenamos, con mi marido hemos decidido que jamás colocaremos uno allí. Hemos notado cuánto conversamos y nos ponemos “al día” cuando compartimos una cena en familia, hablamos y compartimos nuestro día a día. Cenar en familia proporciona al niño una mejor autoestima, que se verá reflejado en todos los actos de su vida cotidiana.
3. Sean cuidadores sensibles: En la primera infancia es fundamental que los padres estén atentos a las necesidades físicas y emocionales de los niños; y cuando ésto sucede, los niños crecen más sanos y felices. Según un informe de Unicef “Los efectos de lo que ocurre durante el período prenatal y durante los primeros meses y años pueden durar toda la vida. Todos los componentes fundamentales de la inteligencia emocional –confianza, curiosidad, intencionalidad, autocontrol y capacidad para relacionarse, comunicarse y cooperar con los demás– que determinan de qué manera el niño aprende y establece relaciones en la escuela y en la vida en general, dependen del tipo de atención inicial que reciben de sus padres”
4. Aliméntenlos bien: Sabemos que una buena nutrición es fundamental para el desarrollo físico y cognitivo de los niños. Pero además de ello, un niño que se alimenta de forma sana es un niño que crece feliz, pues tiene más energía para jugar, para pensar y para relacionarse. Los padres que se preocupan por la alimentación de sus hijos y se toman el tiempo para cocinarles y nutrirlos de forma adecuada, saben que están beneficiando la salud de su pequeños.
5. Aliéntelos a realizar actividades: A los niños les encanta aprender y experimentar cosas nuevas. Cuando un niño crece realizando actividades extracurriculares, se le está dando la posibilidad no sólo de explorar acerca de sus gustos e intereses sino de forjar nuevos lazos sociales en otros círculos fuera de su familia y su grupo de amigos.
6. Asíngenle tareas: Si tienes hijos pequeños sabrás cuánto les agrada ayudarte o cumplir con una tarea que le des. De acuerdo a la edad del niño, puede realizar pequeñas tareas que lo ayudarán a confiar en sí mismos y a volverse más autónomos y responsables. Piensa que un adolescente que no sabe hacer nada es un niño al que se le impidió colaborar.
7. Crean en ellos: Cuando los padres creen y confían en sus hijos le están dando la seguridad de que ellos mismos se quieran y tengan amor propio. Además, cuando se les permite equivocarse y volver a intentarlo también se le brinda el mensaje al niño de que tiene las suficientes herramientas para lograrlo por sí mismo.
8. Estrésense menos: Si eres de los que se estresa cuando tu hijo entra a casa con barro, o sale al patio a jugar con agua o llena la cocina de harina cuando intenta ayudarte, debes saber que no estarían ayudando al éxito futuro de tu hijo. Está comprobado que cuando los padres se estresan los niños también lo hacen. La infancia es una sola y hay que disfrutarla al máximo.
Criar niños ya es una tarea difícil, y criar niños exitosos lo es aún más. Pero todo lo que hagas con amor y pensando en el bienestar físico y emocional de tu hijo rendirá sus frutos. ¿Qué otro hábito añadirías a esta lista para criar hijos exitosos y felices?