Madre de periodista inicia huelga de hambre en Múzquiz

La señora Josefina Mendoza, madre del reportero independiente Alejandro Reyes Mendoza, inició una huelga de hambre frente a la Presidencia Municipal de Múzquiz, para exigir que se reabra el expediente de su hijo acusado de portar arma de fuego y droga.

Lo detuvieron el 14 de abril del año pasado policías municipales, entre ellos el comandante Humberto García alias “El Mono”, quienes lo “invitaron” a descender del vehículo para informarle que Toni Flores, diputado electo por Morena, quería hablar con él para aclarar una información que involucraba a la alcaldesa Tania Vanesa Flores Guerra, hermana de Toni.

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Un día antes, la publicación apareció en la página de otra persona, pero firmada aparentemente por su hijo, quien les aclaró que él no subió esa información y además no era su página.

Al descender del carro de inmediato lo “gancharon” y luego lo pusieron a disposición de policías estatales, uno de ellos identificado como “El Canelo”, quienes Lo trasladaron a las oficinas de la Fiscalía General de Monclova, y ahí le informaron que lo habían detenido por posesión de droga y de una pistola calibre 40, que supuestamente llevaba en los bolsillos del pantalón, lo que el acusado negó.

La señora, quien padece insuficiencia renal y por ello pone más en riesgo su estado de salud, señaló que contrató al abogado César Fraire, de Nueva Rosita, pero nunca hizo la defensa de manera debida, pues incluso jamás interpuso recursos de defensa ni solicitó un peritaje sobre el envoltorio que contenía la droga (fentanilo) y sobre el arma para descartar o comprobar que eran o no las huellas del acusado.

Alejandro Reyes permanece recluido en el Cefereso de Mesillas, en Ramos Arizpe. La señora recibió información del abogado defensor de que había sido sentenciado a 8 años de prisión; decidió contratar otro abogado y éste acudió al juzgado, donde le informaron que aún no había sentencia.

La madre confía plenamente en la inocencia de su hijo y exige la prueba pericial para comprobar que la acusación es injusta. Añadió que solicitó la intervención de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Coahuila, pero no ha tenido una respuesta.

A su hijo lo detuvieron en Múzquiz, en la colonia Justo Sierra a las 10:00 horas, en la calle Justo Sierra, pero en el expediente aparece otra calle. Antes de la aprehensión tuvo tiempo de grabar a los policías municipales, pero en Monclova le “desaparecieron” el teléfono celular, grabación que serviría para su defensa, como una irregularidad más del caso. Al detenerlo en Múzquiz le cubrieron la cabeza y lo pusieron a disposición de los policías estatales.

Informó que permanecerá en huelga de hambre a las afueras de la Presidencia Municipal, hasta que las autoridades estatales ordenen reabrir el caso y realizar el peritaje. También pide que intervenga la Comisión Nacional de Derechos Humanos.