Desde octubre amanece en ejidos de Arteaga hasta a -4°
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Sin embargo, lo que sí les preocupa es la conservación del forraje de los caballos y su propio ganado
Las temperaturas que se mantienen con -4 grados centígrados por la noche en los ejidos de Arteaga, como consecuencia del frente frío número 11 estacional, permite la acumulación de horas frío que son benéficas para las cosechas del próximo año.
Así lo aseguraron autoridades y ejidatarios de la zona, quienes consideran que las bajas temperaturas no son una alarma de afectaciones, sino necesarias para la producción del siguiente año.
La mayoría de las cosechas de frutos o granos, ya concluyó, y las ondas gélidas permiten la acumulación de horas frío que requieren las tierras para producir mayor y mejores cosechas.
“Son benéficas, son típicas de la zona, porque desde los primeros días de octubre se empiezan a presentar las bajas temperaturas, sobre todo en el ejido Mesa de las Tablas”, comentó Gabriel Orsúa, director de Fomento Económico y Turismo.
Mientras que para el área boscosa de Arteaga, agregó, el frío permite erradicar plagas de insectos como gusanos barrenadores o escarabajos, y limpiar de forma natural el bosque para la conservación libre de daños en los árboles.
Al menos desde hace 5 días la población en las partes más altas de la Sierra y zonas ejidales amanece con temperaturas de 4 grados bajo cero, reflejado en una ligera capa de brisa congelada sobre los plantíos y el tejado de sus hogares.
Sin embargo, lo que sí les preocupa es la conservación del forraje de los caballos y su propio ganado, pues no siempre toleran las más bajas temperaturas, que se esperan durante los próximos meses.
“Es normal, pa’ nosotros el frío llega desde octubre, no hay más que taparse, pero pos nosotros ya estamos acostumbrados”, comentó don Felipe Juárez, habitante del ejido Los Lirios.
Por su parte la comisariada de Los Lirios, Blanca Irma Valdés Jaramillo, señaló que solamente una helada hace casi tres semanas causó pérdidas mínimas en algunos sembradíos de maíz y avena, sin embargo, la población se encuentra preparada para las heladas nocturnas.
“Afortunadamente las casas están acondicionadas, se tiene adobe, galvanizado, aislantes y anafres”, concluyó la comisariada.