‘Estoy condenado, hasta acá llegué’... Ex presidente de Uruguay, José Mujica, informó que el cáncer se expandió por su cuerpo y se despide

Internacional
/ 9 enero 2025

Mujica explicó que, debido a su edad y a dos enfermedades crónicas que padece, no puede someterse a más tratamientos

El ex presidente uruguayo, José Mujica, enfrenta el final de su vida con valentía y serenidad. Con 89 años y un tumor en el hígado, ha decidido no someterse a más tratamientos, prefiriendo dedicar sus últimos días a su chacra y a despedirse de sus compatriotas.

En abril de 2024, José Mujica anunció al mundo que tenía cáncer de esófago. La noticia conmocionó a Uruguay y generó una ola de apoyo internacional. Mujica enfrentó esta batalla con la misma fuerza que lo caracterizó como líder político, sometiéndose a 32 sesiones de radioterapia que lograron, en principio, eliminar el tumor. Sin embargo, en una reciente entrevista con el semanario Búsqueda, Mujica reveló que el cáncer había regresado y se había extendido a su hígado.

Mujica explicó que, debido a su edad y a dos enfermedades crónicas que padece, no puede someterse a más tratamientos. Con serenidad y lucidez, compartió su decisión: “Que me pichicateen y cuando me toque morir, me muero. Estoy condenado, hermano. Hasta acá llegué”.

TE PUEDE INTERESAR: Sin pluralidad y voces críticas no hay democracia: Mujica

El histórico dirigente pidió a los médicos que no prolonguen innecesariamente su sufrimiento. En sus propias palabras, no quiere “sufrir al pedo” y prefiere vivir sus últimos días trabajando en su chacra, rodeado de la naturaleza y de su esposa, Lucía Topolansky.

UNA DESPEDIDA EMOTIVA

La entrevista con Búsqueda fue más que un anuncio sobre su salud: fue una despedida de sus compatriotas. Mujica, conocido por su humildad y sus reflexiones profundas, envió un mensaje lleno de respeto y gratitud:

“Lo que quiero es despedirme de mis compatriotas. Es fácil tener respeto para los que piensan parecido, pero hay que aprender que el fundamento de la democracia es el respeto a los que piensan distinto”.

También aclaró que hace tiempo dejó de ser parte activa de las decisiones políticas, aunque sigue ofreciendo apoyo cuando lo considera necesario. Mujica manifestó su deseo de que lo dejen descansar en paz, lejos de los micrófonos y las entrevistas: “Sinceramente, me estoy muriendo. Y el guerrero tiene derecho a su descanso”.

EL LEGADO POLÍTICO DE MUJICA

Aunque Mujica ha decidido alejarse de la escena pública, su influencia en la política uruguaya perdura. Fue un apoyo crucial para Yamandú Orsi, quien asumirá la Presidencia de Uruguay el 1 de marzo. Mujica sigue siendo un referente moral y político, conocido por su defensa de los valores democráticos y su estilo de vida austero.

DATOS CURIOSOS SOBRE MUJICA

Mujica donaba cerca del 90% de su salario como presidente a causas benéficas y vivía en su modesta chacra en Rincón del Cerro.

En 2013, lideró la aprobación de la ley que legalizó la marihuana en Uruguay, convirtiendo al país en un referente mundial en políticas progresistas.

TE PUEDE INTERESAR: ‘Corcholatas’ acompañaron a AMLO en el Zócalo de la CDMX

A pesar de ser un ícono global, nunca abandonó su estilo sencillo ni su lenguaje directo, características que le ganaron el apodo de “el presidente más pobre del mundo”.

José Mujica enfrenta el final de su vida con la misma valentía y humildad que lo definieron como líder. Su legado trasciende las fronteras de Uruguay y deja una lección de humanidad y respeto por la vida. Mientras se despide de sus compatriotas, el mundo entero le rinde homenaje como un símbolo de integridad y dignidad.

COMENTARIOS

Selección de los editores