Agentes en la mira
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De acuerdo con información publicada por el diario "The New York Times", el gobierno de Estados Unidos está fortaleciendo su participación en la guerra contra los cárteles de la droga en México mediante operativos de la CIA, el envío de personal militar retirado e incluso con el diseño de esquemas en los que empresas privadas, formadas por ex combatientes y personal de campo que laboró en sus agencias de seguridad, podrían prestar servicios de capacitación, entrenamiento y apoyo tecnológico a los cuerpos policiacos nacionales.
En esta nota periodística se habla de que en las últimas semanas un pequeño grupo de miembros de la CIA y personal militar de ambos países han sido asignados a una base militar mexicana para recabar información acerca de los cárteles de la droga y diseñar operativos para hacerles frente en ambos lados de la frontera.
Se habla de que estos esfuerzos, realizados por primera vez, están diseñados para cumplir con la normatividad nacional que prohíbe la operación de personal militar y policíaco en territorio mexicano, así como para asegurarse de que la información y la tecnología utilizada no esté al alcance de las agencias de seguridad mexicanas, pues cuentan con un largo historial de corrupción.
¿Por qué tanta sorpresa ante el hecho de que la Casa Blanca está proporcionando este tipo de programas y apoyos en México, un país a cuyos hechos y sucesos -especialmente al sur de la frontera- los estadounidenses le están poniendo cada vez más atención por cuestiones de seguridad nacional? ¿No era de esperarse que el apoyo de EU a México, hoy día, fuera dentro de este tipo de programas, ya que nuestro país, en este momento, es el centro de atención mundial en materia de lucha contra el narcotráfico, no sólo por el número y la crudeza de las muertes en esta lucha, sino porque se estima que estos cárteles proveen 80% de las drogas ilegales que se venden en Estados Unidos?
De 1996 hasta la fecha el gobierno de EU ha destinado fondos para la lucha en contra del crimen organizado por mil 600 millones de dólares. Para poner en contexto este dato, en ese mismo periodo el gobierno de Estados Unidos destino 6 billones de dólares para los hermanos colombianos. Paquistán, en los últimos 10 años, ha recibido 20.7 billones de dólares del gobierno de EU en ayuda. O sea, México recibe una buena cantidad, pero muy reducida en proporción a lo que EU proporciona a otros países. México NO es la prioridad en términos presupuestarios.
El gobierno estadounidense ha entrenado a 4 mil 500 policías federales, los ha provisto de equipo táctico, helicópteros e incluso ha sobrevolado territorio nacional con aviones no tripulados para rastrear las operaciones de estos grupos delictivos, lo que ha fortalecido significativamente los esfuerzos de nuestro país en esta lucha, pero debemos recordar que estos esfuerzos no sólo deben enfocarse a los cuerpos policiacos federales o a las Fuerzas Armadas; México también necesita fortalecer sus instituciones de impartición de justicia, sus policías estatales y locales, así como trabajar con la sociedad en general para poder contar con un clima de seguridad duradera.
¿Por qué causó tanta molestia en el ámbito político la nota del "New York Times"? En parte, porque la información se filtró por un medio extranjero, además, ésta no se había hecho pública ni del conocimiento de los legisladores y el círculo rojo. Adicionalmente, la mención de la DEA y la CIA produce ronchas instantáneas en algunos círculos políticos y académicos.
¿Es posible tener un debate inteligente sobre estos programas? Está por verse. Si claramente estos programas violan la ley, tendrán que cancelarse, pero eso es muy diferente a exigir que se cancele porque se está violando un concepto algo difuso de "soberanía nacional". También creo que se tendrá que hacer pública más información de lo que hacen estos agentes estadounidenses en México, con ciertas restricciones, eso sí. Si se exige total apertura y disclosure de la información, pues mejor que se vaya cancelando el proyecto, porque en lugar de avanzar en esta lucha, se estaría poniendo en grandes riesgos a policías y militares de ambos países.
Los argumentos a favor de esta cooperación son muy diversos, pero uno de los más importantes es que en los últimos tres años este trabajo conjunto ha permitido la captura o muerte de alrededor de 30 mandos medios y superiores de estos cárteles. Me parece que esto debería de ser uno de los argumentos de más peso para que persista este plan de apoyo. Sin embargo, en ambiente preelectoral, lo más seguro es que estas capturas, la necesidad de tecnología y del know how no serán suficientes para justificar políticamente estos programas.
www.anamariasalazar.com
Analista política