¿Viene la guerra, Rubén?

Opinión
/ 2 octubre 2015

La primera reunión del gobierno del presidente Peña Nieto con representantes de la CNTE fue el 12 de enero de 2013, un encuentro del subsecretario de Gobernación Luis Miranda con una comisión de 12 maestros. Se volvieron a ver el 15 y el 19, el 4 de febrero, el 9, el 22; más de cien veces hasta el 10 de junio de este 2015 en que el gobierno determinó no dialogar si los maestros no regresaban a dar clases.

¿Quiere decir que viene la guerra?, le pregunté esa tarde al subsecretario Miranda. Quiere decir que las circunstancias cambiaron, que no podemos negociar contra la pared, ni atender demandas imposibles, respondió. El gobierno resistía una durísima crítica luego de anunciar días antes que suspendía indefinidamente los exámenes de evaluación a los maestros. Esa tarde resolvió pasar al frente.

Así lo marcaba una estrategia diseñada desde abril. El objetivo era hacer las evaluaciones pese a cualquier amenaza, particularmente las de Oaxaca. Se actualizaron 40 expedientes judiciales, se operó con la Sedesol y analizaron distintos movimientos tácticos. El jueves se le puso fecha al proyecto para quitarle a la CNTE el Instituto Estatal de Educación Pública de Oaxaca (IEEPO) y transformarlo en un Instituto manejado por el gobierno de Oaxaca. Se presentaría como una decisión coordinada de los gobiernos federal y estatal. Y aunque, en principio, no se despediría a nadie, ningún miembro de la CNTE formaría parte del nuevo Instituto. Ayer se dio a conocer la noticia.

Apelamos a los maestros y maestras a que tomen esta información con mucha responsabilidad, me dijo el gobernador Gabino Cué minutos después de anunciar la desaparición del IEEPO. Ningún derecho se va a claudicar. Simplemente a partir de hoy tendremos una nueva institución, cuya función será retomar la rectoría educativa en el marco de la responsabilidad del estado.

¿Viene la guerra? Gabino dice que no será un tema de fuerza pública, sino de orden institucional: Tengo confianza en que las y los maestros sabrán entender el nuevo tiempo, porque tenemos que ver al futuro de la niñez de Oaxaca, porque no podemos seguir estando tan rezagados en educación.

Unos 4 mil maestros de la CNTE trabajaban en el IEEPO. El diseño estratégico calcula que podrán operarlo con unas 500 personas. El gobierno tendrá, por fin, acceso a las nóminas y padrones. Más de 8 mil efectivos de las fuerzas federales entrarían en acción en caso de que los maestros optaran por la guerra.

¿Viene la guerra? Rubén Núñez, el líder de la CNTE en Oaxaca, suena muy cauto para una noticia de este tamaño. Es una provocación, me explica. Debía haber un protocolo, debíamos tener una notificación, pero como es costumbre, los gobiernos federal y estatal aprovecharon el espacio relajado cuando celebrábamos nuestra Guelaguetza.

Tanto indiscutible a favor del gobierno. Pero es un juego de muchas entradas todavía.

MENOS DE 140. Sólo para sueldos, prestaciones y gastos, el gobierno de Guerrero necesita de aquí a fin de año 2 mil millones de pesos. ¡Salud!

COMENTARIOS

TEMAS
NUESTRO CONTENIDO PREMIUM