El español rústico, los libros de texto y el deseo de borrar a familias mexicanas diversas
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Actualmente, hay al menos cuatro formas de expresar el verbo venir: “venistes, veniste, vinistes, viniste” y existe una forma cada vez más en desuso y rechazada en las hablas rústicas: “venites”. Así lo describe la Academia Mexicana de la Lengua en su portal www.academia.org.mx. Si bien esta academia no ve lo correcto o no, sino lo que está dentro de una norma, entonces tenemos al español culto medio como rasero que mide la riqueza de un idioma. Es decir, los hablantes medianamente cultos rechazarán “venites” porque empobrece el idioma, aún y cuando forma parte de los arcaísmos y también -infiero-, debido a que representa a las formas de hablar de naciones originarias, de personas incultas, pobres, poco educadas, “nacas”, “pata rajadas” o sin acceso a educación formal, con todas las pinzas que pueda significar esto.
Ninguna corriente ideológica que haya sido sometida a un análisis crítico, se salva de excesos y crímenes viles. Ni el comunismo, ni el socialismo, ni el capitalismo, ni la social-democracia y le puedo seguir. En fin, el asunto aquí son los libros de texto gratuitos que como los otros, tienen sus fallas, pero en esta ocasión, de nuevo está en duda el proceso pedagógico que ocurre en el aula. Tendríamos así, a un millón treinta y dos mil maestros y expertos en el diseño de estos libros, descalificados, al ser clasificados sus trabajos, en la ruidosa ola desinformativa, como comunistas.
No es una historia nueva esta arenga de los libros de texto, es la batalla de siempre entre conservadores y liberales. Y dado el actual contexto previo a comicios nacionales es comprensible que en la arena política se estén dando hasta con los sartenes usando este material educativo que fueran propuesta del ensayista, académico y poeta Jaime Torres Bodet cuando se desempeñó como secretario de Educación y creara la Comisión Nacional de Libros de Texto Gratuitos. Le tocó a él como toca ahora, sortear a la Unión Nacional de Padres de Familia, fundada en 1917 para oponerse a la educación laica que había sido consagrada en el artículo tercero de la Constitución Mexicana, en pro de fomentar el pensamiento crítico, combatir fanatismos, servidumbres y prejuicios. Esta misma unión de padres, actuaba como ahora, en alianza con el Partido Acción Nacional y la organización clandestina de ultraderecha El Yunque. Tal vez si en México se viviera una monarquía en donde se obligara a unir en un solo sistema la religión y la política de Estado, sería lo óptimo para este grupo conservador, a costa de la diversidad de pensamiento que debe prevalecer en una democracia como la que se pregona en México. Ejemplos de esta fusión hay en regímenes totalitarios y sabemos hacia dónde conducen.
Los libros de texto en cuestión y escasamente leídos, se encuentran, para que usted acceda a ellos, en https://www.conaliteg.sep.gob.mx. De acuerdo a las comunicaciones imperantes, hay dos asuntos delicados aquí, así por un lado, se dice que promueven el comunismo. No he encontrado eso en sus páginas, pero ¿será el problema el uso de las palabras “comunitario” o “asamblea”? ¿O el que se incentive el trabajo en equipo y el análisis crítico? Y por otro lado, está el que se muestra la diversidad de familias existentes en México, no sólo la nuclear, sino la extendida, la compuesta y las mono y homo parentales, entre otras. Esta es una realidad que se buscaría negar y con eso alimentar un simbólico destierro hacia las familias diversas que actualmente existen y se suman a los núcleos de crianza en este país. Para los conservadores, esta diversidad es un virus o un demonio a erradicar, percepción que encierra un acto discriminatorio y un discurso de odio contra por ejemplo, la comunidad homosexual.
Por cierto, el brasileño Paulo Freire de orientación marxista y el francés Celestin Freinet, quien se basó en la filosofía krausista y también en el marxismo, son pedagogos respetados cuyos planteamientos han formado a centenares de generaciones de alumnas y alumnos en escuelas privadas de México. Ahora, ante este problema “comunista”, ¿serán rechazados y se quemarán también estos libros de la educación privada, de la misma forma que propone el bloque conservador quemar los libros de texto gratuitos?
Y finalmente, ¿será que en el asunto histórico contemporáneo de estos libros es en donde se concentra una dosis de afirmaciones tan candentes que encienden? Esto ya que no ha pasado el tiempo suficiente para asentar una narrativa de los pasados sexenios. Este apartado de la historia corresponde al mundo globalizado, es decir, a partir de 1991, así que muchos actores referidos están vivos y no tuvieron el beneficio de la ficción que imperaba ante la ausencia de redes sociales que todo lo pulverizan o cuestionan. Entonces, este apartado refiere a luchas entre dos modelos opuestos entre sí, narrados ahora desde otro tipo de poder obviamente. Así, hoy se enfrentan visiones de dos modelos económicos, políticos y sociales que luchan entre sí.
Los libros de texto son solo una parte de los objetos y proyectos que forman parte de esta pugna de mundos, como en el pasado peleara el PAN contra el PRI, y ahora contra Morena, por decirlo desde una forma rápida.
El vocablo política proviene del griego polis que significa ciudad, por lo que refiere a los asuntos de la vida de la ciudad.