Claude Lelouch cumple 75 años con una carrera repleta de altibajos

París, Francia (DPA).- Claude Lelouch ama el cine tanto como la vida. Y por ello considera que los fracasos son como los golpes que depara el destino. Sin embargo el director, que mañana cumplirá 75 años, rueda casi una película al año, aun cuando por temor a las malas críticas llegue incluso a hacerlo con pseudónimo.

Pero el cine le hado también gloria. Recogió la Palma de Oro de Cannes y dos Oscar por "Un homme et une femme".

A lo largo de su carrera, Lelouch rodó más de 40 películas. Su primera cinta en 1960 "Le propre de l'homme" fue un fracaso, pero "Un homme et une femme" fue un triunfo. Desde entonces, la suerte del cineasta ha sufrido altibajos. Hasta que en los últimos años entró en una depresión de la que no ha salido.

Su mayor fracaso fue "Les Parisiens" en 2004, que sólo acudieron a ver unas 17,000 personas el día de su estreno. Y la culpa fue de la crítica. Según el director, los críticos libraron una guerra de destrucción en su contra. Y para demostrarlo, el director regaló un día las entradas para su película. Unas 150,000 personas participaron en la acción y después la afluencia a la película disminuyó.

En 2007 incluso recurrió a un pseudónimo para rodar "Roman de gare". Se presentó bajo el nombre de Hervé Picard y la cinta fue acogida de forma positiva. Tras el estreno, Lelouch declaró a la prensa francesa que quería demostrar cómo una primera película de un desconocido tenía más posibilidades que una nueva obra de un artista maldito, en lo que él se había convertido.

Con "Roman de gare" Lelouch firma un thriller en el que director da muestras de haberse modernizado y de haber aprendido de sus errores, según dictaminó la prensa especialista. Realmente en sus thrillers y en sus historias románticas, Lelouch casi nunca fue infiel a su principio de emocionar al público o de hacer que "sonriera entre lágrimas", como él mismo ha dicho. Y un ejemplo de ello son "Voyou" y "Attention bandits".

Lelouch puso en la balanza el amor por el cine en un documental. Lo primero que vio fue una cámara, pues su padre grabó su llegada al mundo, según explicó en "On s'aimera", el documental de Stéphane Krausz que habla sobre su vida y su desafortunado amor por el cine. En la película narra que su padre era una persona a la que le gustaba rodar con la cámara, que sus padres se conocieron en el cine y que fue su padre el que le compró su primera cámara. "El entusiasmo de mi padre y su fe en mí me ha ayudado mucho", dijo el director, productor, guionista y actor.

Y aprendió solo, de forma autodidacta para manejar la cámara. Con 17 años ganó su primer premio y a fines de los 50 se hizo un hueco con sus documentales y rodó varias películas que apenas trascendieron hasta que dio el gran salto internacional con "Un homme et une femme" (1966). Con esta historia de amor melodramática entre un piloto de carreras viudo consiguió 42 premios internacionales y se ganó el nombre de director estrella del amor romántico.

Lelouch es un maestro de los sentimientos humanos, al que le gusta rodar casi siempre con los mismos actores, entre otros, porque no le gusta correr riesgo.