Hasta un año para dar medicamentos en Magisterio de Saltillo

A través de un desplegado publicado en este medio, ayer la Distribuidora Internacional de Medicamentos y Equipo Médico (DIMESA) informó que la administración de Rubén Delgadillo, líder sindical de la Sección 38, adeuda un aproximado de 229 millones de pesos.

Además, la empresa informó que el convenio de abasto de medicamentos con el Servicio Médico de los trabajadores de la educación, Sección 38, terminó desde el 31 diciembre del año pasado.

Esto afectaría a todos los trabajadores en activo y jubilados de la Sección 38 del SNTE, pero también a los de la Universidad Agraria Antonio Narro (UAAAN) y a los de la Universidad Autónoma de Coahuila (UAdeC) que pertenecen a la Dirección de Pensiones para los Trabajadores de la Educación (Dipetre).

En cuanto al adeudo de 229 millones de pesos, señala el desplegado, corresponde a más de un año y medio de servicios.

DIMESA aclaró que, pese a que no ha recibido pago alguno por parte de Delgadillo Romo, cumplió cabalmente con sus obligaciones y nunca se abstuvo de prestar los servicios de distribución de medicamentos.

Finalmente, DIMESA exige el pronto pago por los servicios brindados y firma como responsable de la publicación el licenciado Fernando Martínez González.

Sin medicamento en la farmacia de la Clínica del Magisterio
Derechohabientes de la Clínica del Magisterio manifestaron a VANGUARDIA su enojo por la falta de medicamentos que hay en la farmacia de dicho nosocomio, quienes también se preguntan dónde está el dinero que a ellos les descuentan cada mes por obtener el servicio médico.

La falta, comentaron, es más evidente en los medicamentos para enfermedades crónicas, los cuales resultan más costosos y son ellos quienes deben invertir para obtenerlos y poder controlar sus enfermedades.

Blanca Azucena Ramos Castilla, hija de una derechohabiente originaria de Sabinas y jubilada de la Sección 38, comentó que además de la falta de medicamentos, en la clínica hacen que la mujer de la tercera edad acuda aunque resulte perjudicial para su salud.

“No hay medicamentos. Yo llevé las recetas de mi mamá, que por cierto me hicieron que la trajera, ella no puede ver y nada más de caminar de la camioneta al consultorio se le subió la presión. Ahorita vamos a arreglar algo de que me van a dar las recetas por tres meses para que ella no venga, pero ¿qué gano con que me la den? si nunca hay medicamentos”, comentó.

Ramos Castilla añadió que desde hace más de un año que no le dan a su madre unas gotas para la glaucoma, por lo que ella debe comprarlas con sus recursos y pagar 670 pesos para que su madre controle su enfermedad.

Por su parte, Héctor Vázquez sostuvo que el servicio en la farmacia es pésimo, pues nunca hay medicamento. Manifestó que desde hace tres meses él tiene que comprar la medicina para la circulación, debido a que aunque en la Clínica del Magisterio le piden que vuelva días después, siempre le dicen que no hay medicamento.

Mal crónico
> Desde más de un año y medio la Sección 38 no paga a la Distribuidora Internacional de Medicamentos y Equipo Médico.
> La Sección 38 es dirigida por Rubén Delgadillo.
> La conclusión del convenio de abasto perjudicará a trabajadores en activo y jubilados de la Sección 38.
> También impactará a trabajadores de la Narro y la UAdeC.
> DIMESA exige el pronto pago.
> La escasez de medicamento sigue afectando a la Clínica del Magisterio.