Algodoneros piden les salven producto dañado

TORREÓN, COAH.- La Confederación Nacional Campesina (CNC) de San Pedro, pidió al gobierno federal un apoyo extraordinario para mitigar las afectaciones que ha ocasionado que no se hayan podido vender alrededor de 50 mil pacas de algodón de la cosecha de 2018.

Actualmente, ese número de pacas de halla en bodegas, a la espera de comercializarse, pese a que el inicio de la siembra de este ciclo está encima. José Natividad Navarro, presidente de la CNC en San Pedro, dijo que son cerca de 4 mil 500 productores afectados.

Navarro hizo un llamado a los productores a hacer una solicitud en bloque para que les hagan caso. Defendió que el algodón es un cultivo socialmente responsable, por lo que para el gobierno federal, opinó, sale más barato el apoyo que estar con políticas asistenciales de despensas o becas.

UN ENTE ALGODONERO

La Laguna de Coahuila siembra cerca de 15 mil hectáreas de algodón y la producción local es de alrededor de 180 mil pacas en 2018. Es decir, que 27.7% del inventario está parado.

Navarro recordó que la problemática se originó en septiembre y octubre pasado, cuando los productores no pudieron pizcar debido a una serie de lluvias intermitentes. “Llovía una semana y a los cuatro días otra vez. No pudimos meternos a sacar la cosecha a tiempo”, dijo Navarro.

La demora provocó que la cosecha saliera tarde y cuando se quiso vender, otros estados como Chihuahua ya estaban comercializando su algodón. Normalmente los algodoneros, según relataron productores, tienen un 20% de algodón vendido para la última quincena de septiembre, pero ahora comenzaron a cosechar un mes y medio después de lo programado.

MERCANCÍA PERDIÓ VALOR

“Salimos tarde al mercado cuando ya estaba saturado, los inventarios ya estaban llenos. Lo que tenemos en inventario en bodegas, es un algodón que por el exceso de agua se manchó y es un algodón que al momento de clasificarlos nos está dando un algodón de cuarta y de quinta, pierde de 12 a 14 puntos de su precio normal”, explicó Natividad Navarro.

Además, pese a que el cultivo estaba asegurado, Navarro explicó que el seguro no cubre la falta de precio o la calidad baja o que tuvieran que salir al mercado después. “Te cubre si graniza, si llueve y no puedes sacar la cosecha por inundación, si te come la planta la liebre, pero no fue el caso”, ahondó.

PÉRDIDAS

El líder de la CNC estimó que las pérdidas por hectárea oscilan en los 15 mil pesos, pues las lluvias tumbaron en su momento un promedio de 700 hectáreas.