Coahuila insumiso, ya levántate: elecciones sin causa a la renovación del Congreso

Las preguntas son simples: ¿para qué sirve un diputado local?, ¿a quién beneficia? Y no es en la noche de los tiempos donde se pierden las respuestas, sino en los dos sexenios que anteceden a esta etapa de administración de la dictadura rubeniana 3.0.

Sirven para aprobar leyes que normalmente les son impuestas por el ejecutivo y es a quien normalmente benefician.

A partir de 1995, los mexicanos percibimos el peligro de una mala elección para la Cámara de Diputados cuando, la mayoría priista de esa legislatura, nos endilgó un IVA del 10 al 15 por ciento y puso a parir chayotes a los mexicanos que consumíamos productos, servicios e insumos. Desde esa fecha, el pueblo fue cuidadoso de no otorgar el poder a un sólo partido, pero acá, en Coahuila, no aprendimos la lección después de ese embrujo de la hechicera hidalguense y fuimos a votar, obedientes, por los regordetes y espesas (de rancho) candidatas a las últimas tres legislaturas estatales o ministros del centro de alabanza de Coahuila, que impusieron las leyes más retrogradas, inquisidoras y absurdas que ha tenido el estado en su historia.

Ejemplares de la ganadería rubeniana y del profe bailador (con la lana) incluían a Víctor Zamora, Samuel Rodríguez, Hilda Flores, Chema Fraustro, Pelancha, Jaime Bueno, Azucena Ramos, Verónica Martínez, Francisco Tobias, Martha Garay, Toño Nerio y Sonia Villarreal, entre otras puras finas personas, fueron quienes aprobaron leyes como las que les quita a los maestros el derecho a la salud y a una pensión digna, las que trataron de disolver la sociedad con matrimonios y adopciones entre personas del mismo sexo, las que impusieron tributos inalcanzables para el pago de servicios del gobierno como: actas, derechos, placas e impuesto sobre nóminas; las que escondieron la deuda impagable de los Moreira con tres candados y un nudo ciego; los que entregaron el agua de las pozas de Cuatro Ciénegas y Nava; los que se burlaron de sus electores y fueron premiados por su obediencia y entreguismo al poder y, en otros casos, al poder y al placer.

Las nominaciones del PRI a fin de renovar al centro de alabanza incluyeron diputados que pretenden reelegirse como Esperanza Chapa (desesperanza como condena, ausente de proyecto y de apoyo popular), así como pupilos de alcaldes y experimentos atroces que terminarán en fracasos, sin embargo, hay diversos factores que benefician la elección para ellos a saber: 1. La fecha de las elecciones fraguadas por Gaby (la de Moreira) que no alentará a tener una alta asistencia en las urnas por el miedo a la pandemia; 2. La nominación de candidatos del PAN y de Morena quienes ya entregaron la plaza de plano en lugares ajenos a la Laguna; 3. El presupuesto millonario vía fondo para la educación que recauda el estado en los laminados y que está siendo desviado para aceitar a los ejércitos electorales que, como la sanguijuela de la biblia, tienen dos hijas: dame y dame, y 4. Que por ahí anda la máscara de Riquelme asustando opositores y apuntando estorbos para luego reportarlos con el dictadorcillo rebajado de triste memoria.

Pero aun con eso, el hechizo puede ser que no funcione en algunos sectores populares y entonces la votación sea contraria al otrora invencible, como sucede en los distritos de Monclova, Piedras Negras, Acuña, Ramos y dos de Saltillo, y resulte la tragedia.

Ya de entrada el PRI avisó que perderá al menos cuatro diputaciones que se reflejan en su lista de plurinominales, sin embargo, Cepeda Boehringer no levanta en Saltillo porque no le gusta ensuciarse con el polvo y soquete que hay en las colonias que visita, y teme que se le arruinen sus zapatos y bolsa Vuitton, mientras la notaria Morales no da de sí, que hasta Alito vino en su ayuda, no solamente es una total desconocida sino que apenas se le entiende lo que dice o como aquel exgobernador hoy en el tambo, ni siquiera para leer el libreto sirve; Pelancha fue un trabuco para Bress, sin embargo, la nomenclatura de Piedras ya es un club de viejitos a los que ni sus nietos les hacen caso, por lo que la sorpresa puede venir desde el fuego amigo.

¿Para qué quiere Riquelme el control del Congreso?, tristemente para seguir enterrando la deuda de Coahuila ahora que a la Cuarta Transformación se le acabaron los listados de corruptos a quienes atacar y pueden apuntar a los Moreira and Bros Cártel. Sin duda que en Oriente los ladrones son amputados, en Europa son imputados, pero acá en Coahuila son Diputados. Haya Cosa. Coahuila insumiso, ya levántate.