Feministas contra los nuevos iPhone, 'son muy grandes para las manos de una mujer'
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Aseguran que es incómodo sujetarlos, pero en realidad no son más grandes que los iPhone 8 y 8 Plus
Apple anunció esta semana el lanzamiento de sus nuevos iPhones que, entre sus novedades, amplían el tamaño de su pantalla. La cosa quedaría así: iPhone XS (5,8 pulgadas), iPhone XR (6,1 pulgadas) y el iPhone XS Max (6,5 pulgadas).
Además, van a dejar de fabricar el iPhone SE, famoso por su reducido tamaño.
Grupos feministas protestan porque consideran que los nuevos dispositivos son demasiado grandes para las manos de una mujer.
En declaraciones al Daily Telegraph, la activista Caroline Criado Perez reconoce estar "desconcertada" porque Apple no diseña los móviles "pensando en el cuerpo de las mujeres" ya que son ellas las que "compran más iPhones que los hombres".
"Deberíamos estar furiosas por esto: pagamos tanto dinero por ello como hombres por un producto que no funciona tan bien para nosotras", continuó.
Zeynep Tufekci, escritora de New York Times, criticó a Apple en Twitter. "Las mujeres con manos pequeñas como las mías, que necesitan el teléfono por razones de seguridad, están atrapadas con algo que no pueden sujetar y con el riesgo constante de que se les caiga".
Más pantalla, pero igual tamaño
Sin embargo, el nuevo trío insignia de iPhones no es en realidad más grande que los modelos del año pasado, a pesar de tener pantallas con mayor dimensión. Los iPhone 8 y 8 Plus tenían pantallas de 4,7 y 5,5 pulgadas, respectivamente, pero tenían biseles muy gruesos.
Los nuevos terminales de Apple apuestan por un diseño de pantalla completa, es decir, se suprimen los bordes. Esto ha permitido a la compañía aumentar significativamente la pantalla sin que los smartphones sean más grandes.
Ante esto, las feministas argumentan que Apple sigue sin tomar en consideración a la mujer. Sophie Walker, del Partido para la Igualdad de las mujeres, dijo que hasta que en "compañías como Apple haya mujeres ocupando cargos altos, al igual que en la política y el sector público, las necesidades de las mujeres quedarán en segundo plano".
"Obviamente, los chicos de Apple están obsesionados con el tamaño, pero a veces el rendimiento también importa", añadió Walker.