Selección de candidatos a la Gubernatura de Coahuila estalla pugnas internas entre militantes

Saltillo
/ 23 enero 2017

El proceso de selección de candidatos a la Gubernatura causa fracturas y desencuentros

Saltillo.- La disputa de las candidaturas para la Gubernatura de Coahuila ha desatado auténticas “guerras civiles” internas en varios partidos políticos de la entidad, que como saldo común han arrojado rupturas de militantes con sus dirigencias estatal, o, incluso, con la nacional.

En este proceso electoral, que tiene su punto álgido el 4 de junio de 2017, se elegirá la Gubernatura, 16 diputaciones locales y 38 alcaldías.

¿UNIDAD ALBIAZUL?

En el PAN, la designación de Guillermo Anaya como el abanderado por segunda vez consecutiva, ocasionó que el 15 de enero el senador con licencia, Luis Fernando Salazar, acusara al presidente nacional, Ricardo Anaya, de amañar el proceso de selección de candidato a Gobernador de Coahuila.

El aspirante  calificó el método de selección como una farsa, pues, aseguró, la idea era imponer a Guillermo Anaya como candidato panista.

La postura de Salazar provocó el apoyo de varios senadores del país, quienes en una postura conjunta definieron al lagunero como “la mejor opción” para la candidatura. 

Las declaraciones del legislador echaron abajo el discurso panista, en el sentido de que el proceso se efectuaba ante el acuerdo de todos los precandidatos.

Por su parte, Ricardo Anaya manifestó ayer haber tenido comunicación con el legislador, para acordar una reunión buscando la unidad en el estado.

SE ECLIPSA EL SOL

Otra “guerra civil” es la que se destapó el interior del PRD, en la que la dirigencia estatal, encabezada por Blanca Pineda (de manera ilegítima, según algunos militantes), inició una confrontación directa con el Comité Ejecutivo Nacional.

El pasado 12 de enero, Mary Telma Guajardo anunció su precandidatura a la Gubernatura de Coahuila por ese partido.

Sin embargo, el 20 de enero, a nivel nacional, el PRD anunció que iría en coalición con Acción Nacional en Coahuila, y que aceptaban como su candidato a Guillermo Anaya.

Un día después, el 21 de enero, el PAN anunció la “Alianza Ciudadana por Coahuila”, junto con la Unidad Democrática de Coahuila, el Partido de la Revolución Democrática, Partido Primero Coahuila y Partido Encuentro Social. 

Inmediatamente, en un discurso de confrontación hacia su propia dirigencia nacional, Francisco Ortiz del Campo, vicepresidente de la Mesa del Noveno Consejo General del PRD, cuestionó la decisión del Comité Ejecutivo Nacional.

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EN EL PRI, RESTAN 

En el PRI, por su parte, el saldo hasta el momento sido el abandono de las filas tricolores de Javier Guerrero García, destacado militante, quien el 14 de diciembre anunció su renuncia a ese partido, con el que consiguió ser alcalde de San Pedro de las Colonias y diputado federal en tres ocasiones.

La salida del ahora aspirante a candidato independiente a la Gubernatura, se dio en medio de un discurso bastante crítico hacia el proceso interno en el que el PRI aún se encuentra para definir a su candidato.

Otros “cuadros” tricolores destacados también enderezaron críticas hacia el partido, entre ellos Enrique Martínez y Morales, Jericó Abramo Masso, Hilda Flores y Román Alberto Cepeda, entre otros.

De ellos, sólo Abramo Masso y Cepeda se “alinearon” posteriormente, mientras que Martínez y Morales y Flores decidieron  finalmente no participar en el proceso interno, al que dijeron que sólo irían si había “piso parejo”.

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