Fernando Montes de Oca y sus ‘Politiquerías’ para todos

La política debe de ser para todos, aunque a veces las palabras rebuscadas y la terminología específica la vuelve complicada, y un tanto aburrida. Para Fernando Montes de Oca esto se volvió un reto, después de publicar libros como “Datos Inútiles del Deporte”, “El Que no Transa no Avanza” y “El Pendejonario: Diccionario de Pendejos y Pendejadas”, no parecía un proyecto tan difícil.

Abogado penalista por profesión, apasionado del beisbol y un lector voraz, Fernando es adicto a los datos inútiles y a la charla entretenida, además de consejero y director de libros de Algarabía. En esta ocasión la Feria Internacional del Libro Coahuila 2018 fue su escenario, el autor presentó “Politiquerías. Glosario para Entender el Tejemaneje de las Elecciones en México”, lo que todos los mexicanos estábamos esperando.

En entrevista con VMÁS, Montes de Oca nos dio más detalles sobre el nacimiento de este glosario, en donde palabras como “acarreado”, “chayotero” y “chapulín” son explicadas en el argot político y hasta con ejemplos.

“Sale de una idea, venían las elecciones, había académicos, entonces quise hacer un glosario para entender cuando los periódicos dicen “chayote”, etc. Porque yo siendo abogado lo sentía muy básico y en la editorial Algarabía hay lingüistas, diseñadores, etc. A final de cuentas aunque terminamos hablando de corrupción, no todo es corrupción, hay mucha cultura, quizá corrupta pero es una acción humana”, aseguró el autor.

“Politiquerías” fue publicado a principios de junio, por Algarabía Editorial, y en él se enlista los términos más comunes en la política de nuestro país, desde los esenciales para el elector hasta los que se lanzan de un funcionario a otro detrás de puertas cerradas. 

“Tengo ya varios libros así con Algarabía, el último fue ‘El Pendejonario’, yo soy el pendejo que lo escribió (risas), surgen de la lengua y del arte. Es algo que hago con mi hermana y mi compañera, Pilar Montes de Oca, ella es lingüista y filóloga y es el quehacer de Algarabía desde sus inicios, tomamos todo aquello de cómo nos comunicamos, y jugamos con las palabras, de política, deportes y groserías”, afirmó. 

Fernando Montes de Oca también explicó que inclusive algunos términos, los revive del olvido y, en algunos casos, los etimologiza. También podremos encontrar datos curiosos sobre los expresidentes, mandamientos para el “buen político”, y citas literarias, tanto de personajes famosos como del pueblo.

Por último, Fernando nos compartió algunas de las definiciones de palabras que escuchamos habitualmente como: chairo, chayotero o chayote, hasta comelonches y dinosaurios que ya son más fósiles.

“Chairo tiene un origen etimológico aún desconocido, no se sabe bien de dónde viene, de hecho no lo puse en el libro. Sabemos de dónde viene, sabemos qué es, son de estas personas clase media, media alta, que se identifican con la izquierda. Por ejemplo, eres un charro estás manejando una camioneta Jeep no sé qué, pero vas a Coyoacán y te compras tu morralito”, compartió Montes de Oca.

En el caso de “comelonches”, el autor asegura que va por el mismo camino que “acarreado” pero con un poco de vocabulario norteño. “Es la operación tamal también, acarradeados, que son personas que van por el boing, y tortas para los eventos. Van para apoyar al candidato de su preferencia solo por comida, como somos los mexicanos que por una torta nos vendemos”, finalizó Fernando.