Coahuila: 66% de personas adultas mayores sufren depresión

En México, el 66% de la población de personas adultas mayores padece depresión; de este porcentaje, del 54 al 84% puede recuperarse, y entre el 4 y el 28% permanecen enfermos y discapacitados porque el trastorno mental los vuelve disfuncionales para la vida diaria y laboral.

La doctora Marisol Robles García, especialista en Geriatría, informó que la prevalencia de depresión en nuestro país afecta de un 15 al 20% de pacientes ambulatorios, y del 25 al 40% de hospitalizados.

TE PUEDE INTERESAR: Gasolina lleva un año en Coahuila arriba de $21 el litro... y es la 4a más barata de México

Las investigaciones revelan que los casos de depresión se presentan con mayor frecuencia en adultos mayores que tienen enfermedad cerebro-vascular (entre un 30 y 60%), y en pacientes con enfermedad arterial coronaria (más del 40%).

“El paciente se llega a aislar, muchas veces la misma familia los alejamos porque el paciente ya no se comporta igual que nosotros o no se siente en la misma forma, entonces llega a perjudicar en la vida afectiva del adulto mayor”.

Los principales síntomas son tristeza constante, aislamiento, pérdida del interés en actividades que antes eran satisfactorias, sensación de cansancio, pérdida del apetito y alteración del sueño.

Una persona adulta mayor tiene un alto riesgo de tener ideación suicida, de ahí la importancia de diagnosticar a quienes sufren depresión para brindar tratamiento oportuno de manera integral.

“Se tiene muy buen pronóstico si el trastorno se detecta a tiempo y se inicia tratamiento de manera oportuna, por eso es importante implementar desde el médico general un manejo integral, desde cómo el paciente está psicológicamente, cuando menos evaluarlo cada 6 meses con la intención de prevenir estos cuadros”.

Cuando el paciente no se recupera, permanece enfermo y discapacitado, muchas veces se debe a que no hay respaldo de la familia y carece de una red de apoyo, y entonces se requiere recurrir a terceras personas.

El riesgo radica en que la persona puede entrar en un proceso de deterioro cognitivo y terminar en alguna demencia. “Se habla de un deterioro del estado neurológico donde empieza a experimentar olvidos frecuentes, pensamiento lento que, asociado a un cuadro depresivo, puede llegar a tener mal pronóstico si no se trata de manera oportuna”, refirió.