Derrumban local comercial de la esquina de V. Carranza y LEA en Saltillo

Saltillo es una ciudad conocida por su adagio “si pega en Saltillo, pega en cualquier lado”, una frase que resuena en los ámbitos comerciales debido a la dificultad que representa conquistar el mercado local. Esta vez ha sido testigo del derrumbe de dos estructuras emblemáticas en la esquina de Periférico y calle Kiosco, en el bulevar Venustiano Carranza.

Estas edificaciones, que albergaban recuerdos de varias generaciones, están siendo demolidas sin una explicación aparente, bajo las órdenes del propietario.

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DEL WENDY’S AL MASON’S, UNA ESQUINA CON MUCHA HISTORIA COMERCIAL

La historia de estas estructuras comenzó en los años 80, cuando la cadena de hamburguesas Wendy’s abrió sus puertas en ese lugar. Era una época de expansión y crecimiento para muchas cadenas de comida rápida, y Wendy’s logró establecerse como un punto de referencia en Saltillo. Sin embargo, a lo largo de los años, el destino de este espacio comercial cambió de manos y de rubros innumerables veces.

El lugar vio pasar negocios tan variados como las famosas M&M Pizzas, un Church’s Chicken, una imprenta, un restaurante de mariscos, un salón de fiestas infantiles e incluso el célebre Mason’s, todos intentando hacerse un hueco en el competitivo mercado saltillense.

Ninguno de estos negocios, a pesar de sus esfuerzos, logró sobrevivir a la quiebra, reflejando la dificultad de mantener una operación comercial en una ciudad conocida por su exigente clientela.

LA DEMOLICIÓN

A principios de esta semana, el equipo de construcción encargado de la demolición confirmó que las estructuras están en proceso de ser derrumbadas. Este anuncio ha dejado a muchos saltillenses con una mezcla de nostalgia y tristeza, recordando los días en que estos lugares eran un hervidero de actividad y encuentros.

MARCAS QUE SE HAN MARCHADO

El caso de Wendy’s no es aislado. Otras grandes marcas como Sears, Whataburger, Carrefour, Woolworth, Popeyes y Lowe’s también han intentado conquistar el mercado de Saltillo, solo para retirarse con el paso del tiempo. Cada una de estas marcas dejó su huella en la historia comercial de la capital del estado, y aunque ya no están presentes, siguen siendo recordadas con cariño y añoranza por los residentes.

La desaparición de estos puntos de referencia comercial es un recordatorio del dinamismo y lo volátil del mercado. Las empresas que han logrado perdurar en Saltillo han tenido que adaptarse constantemente a las cambiantes preferencias de los consumidores locales y a las condiciones económicas. Aquellos que no lo han logrado, como las estructuras en la esquina de Periférico y calle Kiosco, se convierten en parte del paisaje histórico de la ciudad, evocando recuerdos de tiempos pasados.

La demolición de estas estructuras no solo marca el fin de una era para esos negocios, sino que también abre la puerta a nuevas oportunidades y desarrollos. Los saltillenses observan con interés y algo de escepticismo, esperando ver qué nuevo proyecto intentará encontrar su lugar en este mercado desafiante. El reto continúa para los próximos emprendedores que busquen conquistar este rincón de Saltillo.