Hey, Saltillo ¿te gusta el coqueteo virtual? Mal uso de las redes sociales pueden arruinar tu relación

El “coqueteo virtual” está erosionando las relaciones de pareja, un fenómeno social que tiene relativamente pocos años, pero su impacto negativo está dañando los matrimonios, los noviazgos, lo que lleva a divorcios y término de la relación.

La psicóloga Brenda Martínez Villanueva señaló que no hay cifras al respecto, además con el divorcio incausado ya no es necesario dar explicaciones o motivos del por qué surge el rompimiento, sin embargo, en las terapias de pareja sale a relucir que el origen está en el “flirteo virtual” que luego se convierte en una relación emocional o sentimental, lo que después termina en el contacto físico. Considera que detrás de la ruptura, las redes sociales están presentes en el 40 o 50 por ciento de los casos.

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“En mi consulta he notado que las parejas se quejan cada vez más de que él o ella le está poniendo los cuernos, que engañan, que están cometiendo adulterio, por relaciones con terceras personas que iniciaron con el contacto a través de las redes sociales, del Facebook principalmente, ya sea porque conocieron a alguien o más o se reencontraron con el primer amor, con el o con la ex”.

“Resulta extraño, pero lo que puede o debería fortalecer la comunicación en familia, en sociedad, lamentablemente está trayendo algo negativo, como es el surgimiento de relaciones fuera del matrimonio y el rompimiento de noviazgos. En el fondo, hay una falta de compromiso, de interés por salvar la relación, pareciera que hay más infidelidad; cada quien tiene su celular, su contraseña y eso mismo genera desconfianza en la relación”.

Consideró innecesario poner contraseña al teléfono móvil porque debe haber confianza mutua y esa misma confianza debe impedir estar checando las llamadas, los mensajes, el Facebook o cualquier red social que utilice la pareja.

“No es mentalmente sano estar checando el teléfono, pero también es un hecho que hay quienes revisan todo lo que publica la otra persona, a qué publicaciones, mejor dicho, a quienes les da like, me gusta, con quienes interactúa con mensajes. Está mal inventar cuentas para acceder a las amistades de la otra persona, indica inseguridad, un deseo enfermizo de encontrar algo oculto, un mensaje, una imagen para descubrir un engaño”.

“Hay hombres y mujeres que están plenamente convencidos de que son víctimas de un engaño, empiezan a hilar cosas inexistentes, cómo dicen, a ver moros con tranchetes; quieren obligar a la pareja a que admita o confiese que son infieles, que tienen una o un amante, y todo eso va fracturando la relación, los celos se vuelven enfermizo. ¿Los celos son buenos o malos? A mi parecer son malos cuando son fuente de conflictos, de gritos, de reclamos, de agresiones”.

La especialista refirió que ahora los vínculos sentimentales dan la impresión de ser más frágiles, más volátiles, que las personas no ponen de su parte para mejorar la relación, para darse seguridad y confianza mutua. Las redes sociales son buenas, lo malo es el mal uso que les damos, aseguró.

“Empiezan a fantasear con lo que fue o pudo haber sido y ven en las redes sociales la oportunidad de ‘fugarse’ de la relación actual. Es cierto que empiezan con envío de mensajes o imágenes inocentes, compartiendo memes, videos graciosos, pero luego empiezan a avanzar con comentarios o preguntas más personales, más confidenciales, rebasan los límites y caen en una relación extramarital o engañan a la novia, al novio”.

“Caen hombres y mujeres por igual. Hay que imponerse límites en las redes sociales; caer en el engaño, en la traición, en la infidelidad es un alto riesgo. Por mi experiencia, considero que las redes sociales se encuentran, su mal uso, presentes en el 40 o 50 por ciento de los casos de divorcio o de fin del noviazgo. El Facebook lo utilizan para coquetear, encontrar pareja, sin importar quién esté de por medio”, concluyó.