Mujeres trans han recibido rechazo para ingresar a baños de la Feria de Saltillo y Plaza Nogalera

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En Saltillo, la activista trans Karla Llamas, dirigente de la organización Jóvenes Prevenidos, recordó que esta situación ha sido frecuente en la capital de Coahuila
Después de que en la Ciudad de México surgiera un caso de discriminación en el que una mujer trans fue rechazada al intentar ingresar al baño de mujeres de la Cineteca Nacional, la comunidad trans de Saltillo hizo eco manifestando que en la capital coahuilense también se han registrado este tipo de casos, en los que incluso se ha empleado violencia física en su contra.
A principios de la semana, la activista Laura Glover dio a conocer el caso en sus redes sociales, publicando una serie de grabaciones en video en las que explica el incidente en el que un policía de dicho recinto público le pidió que saliera del baño de mujeres golpeando la puerta y llamándola “señor”.
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Este caso generó una intensa conversación en la web, a la que la senadora Lilly Téllez no tardó en sumarse con declaraciones discriminatorias, según lo establecido en la guía de Conapred para abordar estos casos.
En Saltillo, la activista trans Karla Llamas, dirigente de la organización Jóvenes Prevenidos, recordó que esta situación ha sido frecuente en la capital de Coahuila y, en los últimos años, recuerda por lo menos dos casos graves en espacios públicos y privados.
Uno de ellos ocurrió en la Feria de Saltillo, otro en la Plaza la Nogalera y otro más en un gimnasio, además de otros posibles casos que no fueron denunciados o reportados a la opinión pública.
“Tenemos casos de mujeres trans que han sido agredidas, por ejemplo, en la Feria de Saltillo, donde se les prohibió el acceso al baño femenino. Esto ocurrió en el área de bares, donde incluso fueron golpeadas. Y esto sucedió en varios años, no solo en uno, y estuvimos denunciándolo”, dijo.
Afirmó que, si bien algunas mujeres trans no buscan este derecho de manera insistente debido al riesgo y la violencia a la que pueden ser víctimas, también hay mujeres que desean hacer valer sus derechos de reconocimiento de su identidad en todos los ámbitos.
“Hemos apelado a lo que establece la Ley contra la Discriminación de Coahuila, aunque las quejas a menudo tardan mucho y muchas veces no proceden. Lo que nos queda es resolverlo por nuestra cuenta”, explicó.
Entre otros casos, también recuerda que se registró uno en la Plaza Nogalera, donde el personal de seguridad privada sacó a una joven de los baños, y ella procedió a presentar una queja que resultó en una disculpa pública. Sin embargo, hay otros casos recientes en los que ha sido difícil llegar a un acuerdo.
“Hay situaciones que sí se complican. Está el caso de una compañera a quien en su gimnasio le negaron el acceso, y ella está negociando con los propietarios del gimnasio para llegar a un acuerdo”, indicó.
“Estamos tratando de resolver las cosas de manera cercana para evitar llegar a quejas que llevan mucho tiempo y no representan la solución de un problema que debemos abordar mediante la sensibilización. El caso que ocurrió en la Cineteca es un ejemplo de lo que se vive en México, donde prevalece la ignorancia y este tipo de actitudes ignorantes que llegan al insulto y no contribuyen a la vida ni de las personas cisgénero ni de las personas trans”, dijo.
En el Mes del Orgullo de la Diversidad Sexual y las Identidades, VANGUARDIA publicó el caso de otra joven que sufrió una situación de discriminación en los baños de la fábrica de Pilgrims Saltillo, donde tenía que bañarse siguiendo los protocolos sanitarios de la empresa.
“Te puedes imaginar cuando tenía que bañarme. El encargado decía: ‘Tú vienes así en los papeles, debes bañarte en el baño de hombres’. Tenía que esperar a que todos los trabajadores hombres se bañaran para poder entrar, y alguien debía cuidar la puerta de entrada. Obviamente, pasó que entraron y me vieron. ¿Cómo es posible que tuviera que arriesgarme a eso debido a la ideología o el pensamiento de una sola persona?”, explicó Bárbara Flores.
En ese sentido, Karla Llamas dijo que la población trans ha llevado a cabo campañas de sensibilización dirigidas a las empresas, pero en algunos casos, la única solución que han ofrecido es la instalación de un cubículo exclusivo para personas trans, lo cual tampoco representa una solución adecuada para dicho colectivo.
El tema del uso de baños públicos ha sido una preocupación importante para la población trans y trasciende las fronteras de México. Sin embargo, en el país, ya existe un antecedente significativo, ya que en 2015, la activista trans Jessica Marjane Durán, ganadora de un premio Miaw de MTV en la categoría “Transforma”, denunció un caso similar cuando intentó ingresar a un baño de mujeres en la plaza Reforma 222 y fue perseguida por el personal de seguridad.
Este caso llegó incluso a la Suprema Corte de Justicia de la Nación después de que un juez en la Ciudad de México lo desestimara al considerar que no se había demostrado el acto discriminatorio, a pesar de que se les solicitó documentación a Jessica y su amiga para poder acceder al baño.
Actualmente, Karla Llamas señala que no existe una legislación clara para abordar esta situación, aunque las autoridades defensoras de los derechos en la materia la consideren un acto discriminatorio.