‘Cuando la mujer sepa quién es, no buscará a quién imitar’
Maruca Serrano recomendó a las mujeres que sufren de algún episodio de violencia que establezcan límites en sus relaciones personales.
Para Maruca Serrano, licenciada en derecho por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y especialista en orientación familiar y en pedagogía, la mujer debe saber quién es y qué busca para que no elija imitar a otras sino decida reconstruirse todos los días.
“La mujer, cuando sepa quién es, no estará buscando a quién imitar. Yo imito, juzgo o critico cuando no sé quién soy, cuánto valgo o a dónde voy. La mujer tiene que reconstruirse todos los días igual que el hombre porque de esa manera la mujer es feliz, se supera y alcanza realmente las metas que todo ser humano requiere para una vida mejor”.
Luego de haber ofrecido su ponencia “Mujer moderna y liberada” como parte del programa del XXII Congreso Regional de la Mujer organizado por Familia Unida, Maruca Serrano recomendó a las mujeres que sufren de algún episodio de violencia que establezcan límites en sus relaciones personales.
“Una mujer que sufre violencia y no hace algo, es porque no sabe lo que vale ni que puede poner límites. Todo ser humano tiene que aprender a valorarse y a decir ‘hasta aquí llegas, no permito una cosa más’”, y dijo que la mujer fue y lo que ha sido porque lo ha permitido.
En su ponencia clasificó a las mujeres en tres categorías: doña perfecta, doña masculinizada y la mujer moderna. Las primeras son aquellas que tienen por característica que asumen el trabajo cómo el único que tienen que hacer en casa, ven en la maternidad su única satisfacción y soportan lo que sea con tal de mantener unida a su familia.
Las segundas son aquellas listas, fuertes, obstinadas y rebeldes. Buscan siempre triunfar en la vida cueste lo que cueste y critican severamente a las mujeres que se realizan en una familia. En cambio, la mujer moderna, es la que se dedica al hogar y simultáneamente tiene otras actividades que la hacen sentir autónoma.
Durante su segunda conferencia titulada “Tú y el vacío existencial”, la especialista aseguró que las personas compran compartimentos para llenarlo de cosas que quieren aunque no siempre estén contentos con ello. Dice que el vacío existencial obedece a la falta de cariño, amor y atención, por lo que describió sus diferentes tipos.
El primero fue clasificado como el “vacío medio lleno” que se clasifica por creer que a pesar de tenerlo todo, nada es suficiente y suponer que se debe entregar todo, porque de pequeños nunca lo tuvieron.
El “vacío corporal” es aquel donde existen problemas emocionales como la depresión y finalmente el “vacío negro” caracterizado porque los padres permanecen más ocupados en diferentes actividades menos en prestar atención a sus hijos y éstos tuvieron que aprender a “callarse, a no exigir y a no pedir”.