Historia de terror de Saltillo: que te quiten la placa por no pagar el parquímetro
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Sales de tu departamento en el centro de Saltillo, como cualquier otro día por la tarde. Caminas hacia tu auto, estacionado donde siempre porque no tienes cochera, como la mayoría de los vecinos de la zona. Pero al acercarte, notas que algo falta: la placa trasera ha desaparecido, y no solo la tuya, la de toda la hilera de autos estacionados en tu calle.
Antes de que te dé tiempo de pensar qué hacer, un “viene viene” te ve y suelta la noticia:
“Pasaron los polis, se llevaron las placas”.
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No comprendes, así que le preguntas “¿Cómo que se llevaron la placa?” Le preguntas en desesperación
“‘Ora tiene que pagar el parquímetro, ahí está a la esquina pero tiene que ir al mercado, ahí en las oficinas, pa’ recuperarla.”
No es la primera vez que escuchas una historia así. Sabes que si no resuelves hoy, las consecuencias pueden empeorar. Sin otra opción, caminas hacia la Plaza Manuel Acuña. Atraviesas las calles que conoces de memoria: carros estacionados al borde de las banquetas, parquímetros naranjas que pocos entienden cómo funcionan y peatones sorteando obstáculos.
Te acercas al mostrador y le explicas a la joven que eres residente del centro y que, sin cochera, tienes que estacionarte en la calle. La joven te escucha sin mostrar mucho interés y responde con frialdad:
“Necesita sacar un permiso o pagar parquímetro.”
Preguntas dónde sacar ese permiso, pero no te da detalles claros. Solo añade:
“Son $200 más comisión si lo paga hoy. Si lo deja para mañana, el precio subirá.”
Te enfrentas a una decisión incómoda: pagar $200 por un trámite obligatorio e improvisado o no hacerlo y arriesgarte a una multa más cara por circular sin la placa recuperada.
No tienes opción real. Si no pagas, tu situación empeorará. Si pagas, pierdes dinero por algo que no tiene mucho sentido pero que es necesario para evitar problemas mayores.
Así es vivir en el centro de Saltillo: sin cochera, a merced de parquímetros y operativos que complican lo cotidiano. No importa si cumples con las reglas; siempre hay algo más que pagar o un trámite nuevo que resolver.