Rastrea Fiscalía General de Coahuila a vendedores de ‘packs’
Las autoridades indagan sobre el origen de este grupo donde se han filtrado las fotografías íntimas de cientos de mujeres saltillenses
Este jueves, la Fiscalía General del Estado informó que en coordinación con la Policía Cibernética de Coahuila se encuentran trabajando para rastrear los perfiles desde donde se trafican packs de mujeres saltillenses a través de la plataforma Telegram.
De acuerdo con la versión de elementos de la Fiscalía General del Estado, existe una denuncia formal por los hechos en perjuicio de mujeres adultas y adolescentes, exhibidas sin su consentimiento a través de un grupo en dicha plataforma, en donde se presume que se trafica también pornografía infantil.
Esta plataforma digital circulan alrededor de 200 perfiles que buscan desde pornografía hasta servicios sexuales, sin embargo, las autoridades indagan sobre el origen de este grupo y las cuentas que lo administran.
Por el momento, la FGE se encuentra rastreando los perfiles involucrados para dar con quienes se encuentran detrás de esta red. Cabe señalar que en junio de 2019 el Congreso del Estado de Coahuila aprobó la Ley Olimpia, para castigar la violencia digital.
El paquete de reformas aprobadas por los legisladores coahuilenses, contempla castigar hasta con seis años de prisión la difusión de contenido íntimo sin el consentimiento de la víctima en internet. Hasta la fecha en entidad se ha dictado sentencia al menos a 10 personas por divulgar los packs de mujeres.
En 2019 VANGUARDIA publicó que las autoridades de Coahuila encontraron una página en Facebook donde mujeres ofrecían su “pack” por un precio mínimo de 50 pesos. Las creadoras de imágenes eróticas mostraban su cuerpo total o parcialmente, dependiendo del precio que se pagara.
El nombre del sitio no fue revelado, pero sí se obtuvieron números de celular con lada de Torreón, Saltillo, Piedras Negras y Monclova.
Las vendedoras no se encontraron frente a frente con sus clientes, pues los pagos se realizaron vía Paypal o transferencias bancarias. Los precios de las fotografías porno variaban entre los 50 y 300 pesos.