Camisas azules.

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Por lustros, el Partido Acción Nacional vivió de desprestigiar y del desprestigio de los gobiernos emanados del Partido Revolucionario Institucional. Por lustros, el PAN sólo se dedicó a criticar la corrupción galopante, el abuso de autoridad, los negocios al amparo del poder, el compadrazgo, el esquema corporativo y todo aquello de sobra conocido y también, harto documentado sobre los regímenes priístas, tanto a nivel federal, como estatales.
Dice una sentencia árabe a la letra: "ten cuidado al escoger a tus enemigos.pues terminarás pareciéndote o siendo igual a ellos". El PAN, encimado en el poder federal apenas en un ejercicio de dos lustros de poder, ya tiene y goza de las mismas mañas, negocios, latrocinios y abusos, los cuales criticó en su momento en 70 años de gobiernos priístas.
Lo anterior se desprende del libro de investigación, "Camisas azules. Manos negras" de la reportera Ana Lilia Pérez, publicado bajo el sello editorial de Grijalbo. El subtítulo del libro anuncia el contenido de dinamita y pólvora: "El saqueo de Pemex desde Los Pinos." El libro, el cual llegó a mi residencia vía la mano del pulcro Director del CEAS, Fausto Destenave Kuri, con una amable y generosa tarjeta, se lee apasionadamente como una novela, se disfruta como un relato de intrigas, venganzas y ajustes de cuentas y termina uno la lectura con un encabronamiento en la garganta, al conocer de los latrocinios, desvíos, negocios multimillonarios y toda la podredumbre que emana de los que decían en campaña, tener las "manos limpias."
Fausto Destenave, con quien crucé grata charla recientemente y a propósito de éste y otros libros que a últimas fechas hemos tenido como lecturas comunes, me espetó: "Mire maestro Cedillo. Todo esto ya se conocía y los mexicanos lo conocíamos de referencia y oídas. Este libro aporta todos los documentos y los datos duros al respecto." Tiene razón.
Aquí desfilan nombres y apellidos harto conocidos: Vicente Fox, Marta Sahagún e hijos, Felipe Calderón, Cesar Nava, el infortunado ex secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño; Francisco Barrio, Rosendo Villarreal, Raúl Muñoz Leos, Eduardo Romero, Juan Bueno. todos ellos y decenas de nombres y personajes más, involucrados de una u otra manera en la red y la maraña de tráfico de influencias, negocios en y desde el poder, pago de favores, empresas ficticias y todo, todas aquellas acciones y abusos que por lustros, el PAN le criticó al PRI.
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Esquina-bajan
Pero, varios y no pocos priístas, aparecen también implicados en este amasijo de negocios, impunidad y corrupción. Entre éstos, aparece el ex Gobernador de Coahuila, Enrique Martínez y Martínez y varios empresarios y políticos coahuilenses con fuertes intereses en el sector energético, como Antonio Juan Marcos Issa, el desaparecido (inicios de 2007) Francisco León García, el famoso "Pancho León", y un multicitado personaje, Rosendo Villarreal, ex alcalde de Saltillo y miembro prominente de Acción Nacional. "El poder absoluto corrompe absolutamente", decía Montesquieu; su aforismo lapidario y como ejemplo el PAN y sus miembros destacados, lo cumplen a la fecha. Vemos entonces y de acuerdo con los documentos de esta investigación, que la ambición de los panistas ha sido igual que la de los priístas. Aquello que señalaban con índice de fuego, es ahora lo que se les señala y exhibe.
La ambición no tiene límites, pero dice un axioma popular: la ambición suele romper el saco. Y hoy el saco de los panistas está más que roto, con serios agujeros imposibles de remendar o maquillar por voraces equipos de contadores tan podridos, como los que en su momento sirvieron al PRI.
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Letras minúsculas
El revolucionario, lo dijo un literato como Alejo Carpentier, por lo general deviene en dictador. Los panistas han terminado robando más que aquellos a quienes criticaban. Su muerte política está inminente.