El cinturón diamante del CMB es sólo para inmortales
COMPARTIR
Todos los boxeadores del mundo sueñan desde sus inicios en ser campeones del mundo y, perdonando la inmodestia, con algún día ganar el cinturón verde y oro.
Pero en el pasado el cinturón para campeones no existía, sólo trofeos o certificados. Fue la British Boxing Board of Control el primer organismo que introdujo los cintos Lonsdale para presentar a sus campeones. Algunas Federaciones Nacionales también los introdujeron, pero para títulos mundiales no existía la costumbre de premiar al campeón con su cinto.
Si vemos videos del pasado, el mismo Muhammad Ali, al principio de su época, no los recibía. Fue el CMB el que los introdujo en 1976 -mi primer año como presidente- por idea del fallecido, entrañable e inolvidable amigo, Coronel Hamouda, de Túnez.
Por cierto, por patrocinio de Adidas salieron los primeros cintos de campeón mundial verde y oro. Este cinto ha sufrido cinco modificaciones en sus 37 años, hasta tener ya el definitivo con la placa rodeada de tres óvalos con las banderas de las 165 naciones afiliadas al WBC, con el logo en placa de oro y las fotos en cerámica de Muhammad Ali y Joe Louis.
No puedo olvidar aquella memorable ocasión en que, como secretario general del CMB, fui como representante a la pelea de regreso de Muhammad Ali, en su encuentro con Joe Frazier en el Madison de Nueva York, lleno hasta las lámparas, por el campeonato mundial de peso completo del CMB, a la que asistieron Frank Sinatra, Jacqueline Kennedy, Joe Louis y miles de artistas, políticos y demás. No subí al ring a poner el cinto porque todavía no se implementaba.
El CMB ha tenido ya a muchos de los más grandes campeones de la historia: Muhammad Ali, Mike Tyson, Lennox Lewis, Ray Leonard, Roberto Durán, Julio César Chávez, Larry Holmes, Vitali Klitschko, Marvin Hagler, Tommy Hearns, Oscar de la Hoya, Floyd Mayweather Jr., Manny Pacquiao, Rubén Olivares, Sal Sánchez, Mantequilla Nápoles, y muchos más en las 1,801 peleas de título mundial en la historia del organismo. También sus más de 420 campeones mundiales en los 50 años desde su fundación, en 1963, en la Ciudad de México.
Entre todos ellos, ha habido un buen número de grandes boxeadores tremendamente taquilleros. Oscar de la Hoya y Floyd Mayweather, quienes en su pelea impusieron el récord más alto en la historia de ventas en Pago por Evento y recientemente, el estrella filipino Manny Pacquiao. Todos han incrito su nombre en la historia con letras de oro.
Sin embargo, algo faltaba en el CMB para la batalla entre el fenómeno moderno Manny Pacquiao y el ídolo de Puerto Rico, Miguel Angel Cotto, promovida por Top Rank, que impulsaría enormemente esa pelea. Los miembros del CMB discurrieron entonces la introducción del cinturón CMB de Diamante, que se entregaría en peleas entre verdaderos ídolos del boxeo del tope de la élite.
Sólo cuatro boxeadores han logrado la hazaña de subir al ring para ganarlo: El ídolo de Filipinas, Manny Pacquiao, fue el primero; Sergio Martínez, de Argentina, fue el segundo; Bernard Hopkins, fue el siguiente; Floyd Maywea-
Ther el último.
Esto es el cinturón de Diamante del CMB, el premio más alto que boxeador alguno pueda ganar sobre el ring. El que lo gana lo conserva para siempre, porque sólo lo disputan los más grandes, en cambio un título mundial puede ser disputado por cualquier boxeador clasificado. El cinturón de Diamante sólo puede ser disputado por los consagrados, nadie más.
Cuando yo subo al ring, lo mismo que mis compañeros del CMB, al presentar ese cinto, me embarga un sentimiento de admiración para los dos que compitieron por él. Me domina el orgullo de estar presente en ese histórico momento. Siento la gratitud a Dios por poner el boxeo en mi destino, por sus noches de gloria y por vivir tan cerca del deporte de mis amores.