Orange is the New Black Cuidado, chicas, Alex Vause está de regreso

Netflix ya estrenó la tercera temporada de “Orange is the New Black” y la buena noticia para los fans de Laura Prepon es que la actriz está de vuelta en el show. Buena para Laura, más no tanto para su personaje, pues Alex se enfrentará a otro pequeño infierno personal dentro del que ya conocemos –la Penitenciaría Litchfield.

Ahora, entre sus nuevos problemas, también deberá afrontar la paranoia constante y quizá la muerte... Prepon es una buena actriz, me doy cuenta. Sin ella, la segunda temporada sufrió una caída. Así que aplaudo su regreso.

En esta tercera entrega la creadora Jenji Kohan recupera el rumbo y nos ofrece nuevas tramas interesantes pero no tan melodramáticas (lo siento, pero a mí no me convenció el triángulo “amoroso” entre Vee, Taystee y Poussey) como en el ciclo pasado.

En esta ocasión, el reclusorio femenil se enfrentará a un nuevo conflicto: será adquirido por la iniciativa privada y las reglas cambiarán.

Gracias a este pequeño giro podremos conocer algunos nuevos detalles de otros guardias de seguridad, y también conoceremos a nuevos integrantes del sistema penitenciario.

Pero los personajes más interesantes volverán a ser las reclusas, por supuesto. En esta ocasión, la serie nos adentrará en la vida de dos de mis personajes favoritos: Big Boo (Lea DeLaria) y Norma Romano (Annie Golden).

Finalmente, sabremos un poco más sobre la lesbiana más activa de la prisión y sobre la ayudante de cocina de la que no hemos escuchado ni una palabra. Desde la primera temporada les eché el ojo a estos personajes porque me imaginaba que historias muy interesantes se debían esconder detrás. Y así fue. Son dos de los capítulos mejor logrados del ciclo.

Lo que me encanta de “Orange…” es que se la jugó desde el inicio y creo que ganó una importante partida. Kohan nos introdujo a un sinfín de personajes desde la primera temporada. Pequeñas apariciones, pero potentes, que poco a poco han ido creando un fuerte lazo con el público. Era un arma de dos filos puesto que series con demasiados personajes pueden caer en la trivialidad y nunca profundizar en los traumas y motivaciones de cada individuo. A mí, por ejemplo, nunca me convencieron del todo los personajes de “The Walking Dead” y creo que fue una de las razones por las que finalmente fue cancelada “Last Resort”.

Pero “Orange…” ha conseguido que demasiados personajes no sean muchos. Al contrario, los espectadores queremos conocer más sobre estas mismas mujeres y también deseamos que aparezcan nuevas delincuentes (como el nuevo romance de Piper, Stella). Nunca es suficiente cuando las historias están tan bien escritas y actuadas, como en el caso de “Orange…”.

Y si alguien quiere saber quiénes fueron mis personajes favoritos en esta tercera entrega, lo complaceré: Alex Vause (Laura Prepon), Big Boo (Lea DeLaria) y por supuesto, de nueva cuenta “Pennsatucky” Doggett (Taryn Manning) y Poussey Washington (Samira Wiley).

Mi calificación: 90 de 100. 

Mi Twitter: @CalladitaR