Adviento: una playlist de Nativitas y Epifanía
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* Entre los aromas del ponche, del pavo y la pierna adobada, con el fondo musical de las arias y coros del Messiah de Handel, transcurrieron las noches de navidad de mis años de infancia y juventud temprana. El día 24 del mes de diciembre tocaba y acompañaba desde el piano o el órgano a los coros de las iglesias evangélicas bautistas en las que crecí y forjé mi fe. El bagaje musical heredado a través de esos años y la disciplina en el montaje del repertorio musical navideño fueron de los señuelos que me anclaron a la profesión musical.
El descubrimiento del vastísimo e inabarcable repertorio navideño fue paulatino, desmadejándose ante mis oídos a través de grabaciones y conciertos en vivo y en la lectura de transcripciones para órgano y piano que descubría con alborozo. Luego vendrían los años de estudio de los preludios de coral sobre temas de navidad y las partitas para órgano de Bach. Dos de ellos, In dulce jubilo y Von Himmel hoch, da komm ich her, (“Desde el alto cielo, de ahí vengo yo”), constituyeron mis primeros abordajes serios en las obras para órgano de Bach.
El primero de ellos, In dulce jubilo, es un cántico cuyo texto macarrónico (el que utiliza una mezcla de dos o más idiomas en la misma frase) intercala palabras y frases en diferentes lenguas que, en este caso, es el latín y el alemán. Sus raíces se remontan al siglo XIV, la autoría del himno se atribuye al dominico alemán Heinrich Seuse (c. 1295-1366). Pasó por las manos e ingenio de Martín Lutero en 1545, cuando le agregó una estrofa. Bach la utilizó en varias ocasiones, en preludios de coral y una fantasía para órgano y en su Oratorio de Navidad, BWV 248. En el caso del himno navideño Desde el alto cielo, de ahí vengo yo, Martín Lutero lo compuso en 1534, Bach lo tomó posteriormente como uno de sus corales favoritos.
El organista sueco Hans Fagius (1951), grabó en 1990 la obra integral para órgano de Bach en un total de 17 volúmenes, además del Arte de la fuga. En el volumen 7 de esta serie incluye estos dos preludios de coral. Fagius no traiciona el espíritu potente y riguroso del himno medieval, utilizando registros de 8 y 16 pies en los teclados y los pedales.
* El maravilloso ingenio musical de los italianos en el periodo del barroco musical nos legó obras excelsas con el tema de la navidad. Autores como Arcangelo Corelli, Giuseppe Torelli, Pietro Locatelli y Francesco Manfredini compusieron Concerti Grossi en los que recrearon la atmósfera y espíritu navideños. La popularidad in crescendo, desde el último tercio del siglo pasado, de las grabaciones historicistas que despliegan en grabaciones pulcras el maravilloso sonido producido por instrumentos de época, siguen en boga.
En esta tendencia, y con el tema de las obras barrocas navideñas, está el disco Christmas Concertos-Corelli & Torelli (1983) con la Academy of Ancient Music, conducida por Christopher Hogwood (1941-2014). En él se pueden apreciar obras de Corelli, Torelli, Werner, Gossec, Haendel, Vejvanovsky, Bach, entre otros. Hogwood fue pionero e impulsor de las grabaciones e investigaciones historicistas, creando toda una vertiente de interpretación que se ha acrecentado y fortalecido.
* En 1982, George Winston (1949-2023), pianista y compositor estadounidense al que se le atribuye el estilo instrumental y minimalista que él mismo denominó “piano folk rural”, grabó December, que es, definitivamente, su disco más vendido. En éste se puede apreciar una de las piezas para piano minimalistas más icónicas del siglo XX, Thanksgiving, obra inspirada en los parajes nevados del estado norteamericano de Montana.
El álbum recrea el ambiente gélido de la temporada invernal, a través de arreglos de piezas clásicas y folclóricas. Curiosamente Winston no tenía ni formación ni interés en la música clásica. Sin embargo, en este álbum, especialmente en Thanksgiving, Winston utiliza recursos técnicos de composición como intervalos abiertos y ostinatos con el propósito de crear atmósferas meditativas y contemplativas.
CODA
“La música es el ejercicio aritmético oculto de una mente que no es consciente de que está calculando”. Sir John Eliot Gardiner.