El hidroarsenicismo daña la salud, pero a los gobiernos no les importa

Opinión
/ 22 octubre 2023

Desde hace décadas se reconoce la presencia de arsénico en el acuífero que da de beber a la Comarca Lagunera. Por algo existe el proyecto de Agua Saludable para La Laguna, que pretende abastecer de agua en cantidad y calidad a los habitantes.

También desde hace décadas se sabe lo perjudicial a la salud que representa la ingesta crónica de agua con arsénico. Por algo se ha acuñado desde hace tiempo el término hidroarsenicismo regional endémico crónico (HACRE).

TE PUEDE INTERESAR: La Laguna: Muchos diagnósticos, pocas acciones en materia de agua

Sin embargo, poco se sabe qué hacen las autoridades de cualquier nivel en atender las enfermedades provocadas por beber agua contaminada con arsénico. De hecho, no es que no se sepa, lo que pasa es que no hacen nada en atender los efectos a la salud, por más que existan evidencias de los efectos, sobre todo en comunidades rurales o ejidos de la región.

El tema viene a cuento porque esta semana, a través de una nota del diario El País, se dio a conocer de una investigación publicada en junio pasado en la revista Nature sobre la asociación del arsénico con la obesidad, diabetes e hipertensión en la Comarca Lagunera.

La investigación, llamada Association of obesity, diabetes, and hypertension with arsenic in drinking water in the Comarca Lagunera province (north-central Mexico), encabezada por el investigador de la UNAM, Martín Soto Jiménez y apoyada por otros investigadores de la Universidad Autónoma de Coahuila revela que la ingesta de agua con arsénico ha aumentado el riesgo de sobrepeso, obesidad, diabetes tipo 2 e hipertensión.

El estudio investigó el papel del arsénico en el agua potable como factor de riesgo para estas enfermedades metabólicas. Los investigadores se enfocaron en poblaciones con niveles de arsénico en agua potable históricamente moderados (San Pedro) y bajos (Lerdo), y personas sin evidencia histórica de contaminación del agua con arsénico.

Se encontró que las personas que vivían en ciudades con altos niveles de arsénico tenían mayor riesgo de obesidad en comparación con aquellos que residían en otras ciudades. Los hombres tienen más probabilidad de ser diagnosticados con diabetes tipo dos e hipertensión

El estudio refiere que el bombeo de gran volumen crea gradientes no naturales de agua subterránea que movilizan las aguas desde la zona “sucia” (por ejemplo, los municipios de Francisco I. Madero y San Pedro) a la zona “limpia” (por ejemplo, los municipios de Torreón y Lerdo), promoviendo la intrusión de agua con altos contenidos de solutos, incluido el arsénico. “El progresivo agotamiento de las aguas subterráneas hipotéticamente aumenta los niveles de arsénico porque las aguas bombeadas han interactuado durante más tiempo con rocas volcánicas e intrusivas, una de las probables fuentes de arsénico en la región”, continúa la discusión del estudio.

En consecuencia, el movimiento continuo y la mezcla de masas de agua desde zonas sucias a zonas limpias podría aumentar los niveles de arsénico en el polígono de aguas subterráneas del depósito de agua limpia. “Dadas las graves implicaciones para la salud asociadas con la exposición al arsénico, es imperativo que se implemente un programa de monitoreo sistemático y continuo en la región”, se menciona.

TE PUEDE INTERESAR: Agua Saludable para la Laguna, una obra importantísima’... afirma AMLO que acuíferos fueron sobrexplotados en periodo neoliberal

AL TIRO

El estudio también revela otra hipótesis, la contaminación de los alimentos cultivados en la región. “La Comarca Lagunera es el primer productor nacional de lácteos y carne de ave y un importante productor de forrajes y nueces. El arsénico presente en las aguas subterráneas puede entrar en la cadena alimentaria, contaminando potencialmente los productos agrícolas y ganaderos”, refiere.

Así pues, se presenta otro estudio, otra investigación que ha medido el daño del arsénico a la salud. Pero ni en Coahuila ni en Durango, mucho menos en los municipios, existe algún plan para atender las consecuencias en la salud pública del hidroarsenicismo.

¿Hasta cuándo?

COMENTARIOS

NUESTRO CONTENIDO PREMIUM