La ‘entrega’ de los 29 capos: ¿por qué las autoridades mexicanas no hicieron justicia?

COMPARTIR
En una sola operación, que hace palidecer el nebuloso traslado de ‘El Mayo’ a una prisión estadounidense, se ‘entregaron’ cuarenta años de historia criminal del narcotráfico
Sobre la conciencia o inconsciencia de los 29 capos entregados por el gobierno de México, a manera de ofrenda al gobierno de Trump, pesan miles de vidas, miles de asesinatos, torturas, violencia y desapariciones forzadas. Estas víctimas, sus familias y comunidades encarnan dolorosas historias sin fin, de terror, rabia y desamparo. Hoy, todo ese dolor se transmuta en “moneda de cambio” para apaciguar al magnate.
Los 29 capos representan cuarenta años de violencia impune y a múltiples organizaciones criminales, desde Rafael Caro Quintero y el viejo Cártel de Guadalajara; hasta los cabecillas del cártel de Los Zetas, el más sanguinario de la historia del narcotráfico en México. También están representados el Cártel de Juárez y el Jalisco Nueva Generación, entre otros.
TE PUEDE INTERESAR: Alemania, al rescate de la democracia
¿Cómo olvidar las atrocidades perpetradas por Los Zetas en Coahuila? Ahí siguen las víctimas asesinadas o desaparecidas, que todos los días y con tanta valentía nos recuerdan sus familias, organizadas en FUNDEM, FUNDEC, ellas, voces que claman en el desierto. Exigen justicia a autoridades ciegas, omisas, distraídas o cómplices, fuente y origen de tanta impunidad.
Aclaro una distinción jurídica fundamental: mientras que los ciudadanos pueden hacer cualquier acción que no esté explícitamente prohibida por la ley, los funcionarios públicos sólo pueden hacer aquello que está explícitamente mandatado por la ley.
La entrega de los 29 capos es, para decir lo menos, una acción sin precedente. Nadie esperaba algo así, ni siquiera los abogados de los capos, carece de toda ortodoxia. El Consejo de Seguridad Nacional no tiene facultades para proceder como lo hizo y, aun así, asumió la responsabilidad. Llama la atención cómo deslindaron a la presidenta Sheinbaum.
No se abordó el tema durante la mañanera y se pasó a una conferencia de prensa posterior en la que participaron el fiscal Alejandro Gertz, los secretarios de Defensa y Marina, así como el nuevo supersecretario de Seguridad, Omar García Harfuch.
El asunto legal de fondo es este: el gabinete de seguridad no tiene facultades legales para proceder como lo hizo y los capo-reos fueron entregados a manera de ofrenda, haciendo a un lado la Constitución, los tratados internacionales y la ley. De manera particular, se ignoró el proceso legal de extradición. Gertz Manero citó la Convención de las Naciones Unidas contra la Delincuencia Organizada Transnacional, también conocida como Convención de Palermo, pero ésta no exceptúa en ninguna de sus partes a la ley en materia de extradición.
De ninguna manera pretendo salir en defensa de los capo-criminales, por el contrario, celebro que les alcance la acción de la justicia, pero es importante llamar a las cosas por su nombre y preguntarnos: ¿por qué las autoridades mexicanas no hicieron justicia, como es su obligación?
También hay una vertiente política, todo el tinglado se montó para apaciguar los exabruptos de Trump. Los migrantes que tratan de cruzar la frontera han disminuido drásticamente. En una sola operación, que hace palidecer el nebuloso traslado de “El Mayo” a una prisión estadounidense, se “entregaron” cuarenta años de historia criminal del narcotráfico, historia que los 29 señores podrán contar a cambio de clemencia. En otro rubro, el Gobierno mexicano ofreció imponer aranceles a cuanto venga de China. Todo esto, ¿a cambio de qué?
Mientras la entrega de los capos fue noticia principal en México, no lo fue para ningún medio de comunicación estadounidense. Los pocos que abordaron el asunto sólo trataron la anhelada venganza de la DEA contra Caro Quintero. Lo demás pasó de noche. Pasada la reunión del gabinete de seguridad, en Washington, sólo el secretario de Estado, Marco Rubio, emitió un escueto mensaje de agradecimiento.
TE PUEDE INTERESAR: Entrega de capos: Vergonzosa ofrenda a EU y un fracaso del Estado mexicano
Por lo que toca a migración y comercio, México se desvive, en vano, por satisfacer a Trump, excepción hecha de una pequeña flor que el magnate lanzó a la Dra. Sheinbaum, la hostilidad persiste; bajó un poco mientras Trump enfocó sus baterías sobre Ucrania, pero hasta ahí. La cereza en el pastel de todo esto es el anuncio de que los aranceles van hacia adelante, se aplicarán a productos específicos. Sigo creyendo que es otra finta de Trump: asustar primero y luego ceder al cuarto para las doce.
Veremos qué sucede esta semana. La crisis cayó como anillo al dedo a la Presidenta: 85 por ciento de aprobación en mes y medio de Trump. Nacionalismo y solidaridad nacional, quizá una dosis de natural indignación por tratarse de una mujer, cosa que Trump mismo ha abordado con harto cuidado. También ayuda no tener oposición digna de tal nombre, excepción hecha de algunas voces que claman en el desierto.