Rieles y vagones tardíos

Dicen que será hasta 2029. Que se tardarán cinco años en lograr que se pueda viajar en tren desde Saltillo a Laredo o a México.

La gente recuerda los viajes cómodos -de una noche- para amanecer en México. Era “el regiomontano”. Tenía su vagón estacionado en Saltillo, Los pasajeros, con boleto comprado, llegaban y se subían y se acomodaban para esperar tranquilamente el momento en que se sintiera el tirón de la máquina. Ahora sí, ya estaba enganchado el vagón y empezaba el avance. Seguiría la cena en el salón comedor. Después de charla en el bar, el descanso en cómoda cama. Despertarse para el desayuno y la llegada a la estación de Buenavista, en la Ciudad del México era la culminación de la férrea aventura.

Serán ahora rieles y vagones tardíos. Se espera que los viajes puedan realizarse hasta el quinto año del sexenio que se inicia.

EXTREMOS VICIOSOS

Es conveniente recomendar la lectura de la “Ética a Nicómaco”, escrita por Aristóteles. Ahí se ve claro cómo en el centro está la virtud, el equilibrio y la sana proporción.

Los extremos son viciosos. Puede haber orden meticuloso y escrupuloso o desorden descuidado. Puede haber charlatanería de verborrea torrencial o voz inhibida de incomunicación silenciosa. Puede haber despilfarro o tacañería. También, como ahora, puede darse el tradicionalismo anacrónico y obsoleto o el modernismo que solo quiere estrenar.

ELJUSTO MEDIO

En la ética del griego sabio se señala la justa medida que evita exceso y defecto, precipitación y pachorrudez, nostalgia enfermiza y futurismo de “úselo y tírelo”.

Lo sano y lo equilibrado, lo maduro y benéfico es que la tradición constitutiva se conserve intacta y que legislaciones y decisiones tengan la sabiduría de una adaptación sin rupturas.

En todo el mundo se está dando el tirón entre conservadurismo y progresismo, entre pasado y porvenir, entre lo de siempre y lo innovador. Pero ni la repetición invariable ni la improvisación acelerada están libres de vicios.

La mayoría, en Argentina, quiere derechizarse y la de Francia quiere izquierdizarse, México quiere humanizarse pero hay tirones extremistas que lo zarandean.

NOMBRAMIENTOS EN DIÓCESIS

Hay un clima de renacimiento y de renovación en la vida de la Diócesis de Saltillo.

En las redes sociales se han visto aparecer las fotos de varios nuevos párrocos que estrenan su caridad pastoral en encomiendas parroquiales.

Responsabilidades especializadas se han repartido a la juventud sacerdotal. Últimamente el sabio y perseverante cumplimiento del Vicario General ha sido sustituido por nuevo clérigo, de similares cualidades.

Dentro de las tensiones que se dan ordinariamente en la vida de la Iglesia universal, se destacan latitudes de gran esperanza, como podemos observarlo en la diócesis que preside nuestro obispo Hilario.

Se van multiplicando los servicios educativos para todas las comunidades y ministerios. El objetivo es lograr una capacitación cada vez más suficiente para que se multipliquen los buenos frutos en todos los apostolados.

NI GANADORES NI PERDEDORES

Las diferencias generan las tensiones. Cada extremo del arco tira de la cuerda que se tensa y se hace así capaz de lanzar la flecha hacia el blanco.

Es sana la tensión. No la ruptura. No se trata de hacer un mundo de vencedores y vencidos. La mejor meta es aprovechar las diferencias, no para competencias sino para colaboración. No en contienda egoísta excluyente sino haciendo el “nosotros” comunitario que lleva hacia arriba y hacia adelante...