Se puede decir... Que la violencia no “para”

Pero no se puede decir... Que aparece aquí, allá y “acuyá”. Sin tomar en cuenta la violencia en contra de las mujeres, resulta que la SEDENA ha escenificado una matanza terrorífica allá en Tamaulipas, en contra de unos jóvenes, a los que asesinaron a balazos, sin medir las consecuencias, y sin aplicar los protocolos que se deben de dar antes de cualquier orden que den, o sea que actuaron a tontas y a locas, y como son hechos locales, a los sardos asesinos se les debe de juzgar y sentenciar por autoridades locales y no militares, porque “éstas” los protegerán.