Playboy: Lejos del porno, cerca del arte

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Con 11 años en México, la revista Playboy aún se enfrenta a algunos prejuicios morales en la sociedad
CIUDAD DE MÉXICO.- Actrices, celebridades, cantantes, modelos y hasta nóveles personalidades se han puesto las orejitas de conejo y han posado para la lente de Playboy que llega a sus primeros 60 años en el mundo y 11 en México.
Para los editores de la publicación mensual en México, el arte que presume la revista en sus páginas está por encima de cualquier pose pornográfica. "La fotografía de Playboy no es agresiva, ni pornográfica, es más bien sútil, más parecido a la Venus de Milo que a una película de Nacho Vidal (actor porno)", expresó Arturo Flores, escritor y editor en jefe de la edición mexicana de la revista.
Para la marca, explica, la idea principal sobre la mujer es la de posicionarla como una diosa, como la fuente de inspiración de este "soltero adinerado", personaje en que se inspiró Hugh Hefner para crear la revista.
"Playboy no es una revista porno, es sobre desnudos, además estamos en una era en la que todavía existe prejuicios sobre el desnudo, cuando es algo que ha existido desde siempre, en el arte, por ejemplo", expresó Sagrario Saraid, directora Editorial de Playboy México. Sobre los prejuicios que aún rodean tanto al concepto como la revista, está el rechazo que se dio a la donación de víveres que la edición mexicana buscó hacer a los damnificados de los estados del país a raíz de los ciclones Ingrid y Manuel.
"Es algo muy triste, pero a final de cuentas toda la atención que obtuvimos nos ayudó para que aún más personas se acercaran a donar y llevaremos un tráiler a Sinaloa en estos días", comentó Saraid.
Un segundo aire
Controversial, innovadora y sobreviviendo en un mundo en donde el internet comienza a ser la nueva era, Playboy es ya parte de fundamental del mundo del entretenimiento "y sigue haciendo historia", asegura Arturo Flores.
Con este atractivo, algunas personalidades mexicanas tuvieron el tino de decidir quitarse la ropa para el conejo con esmoquin, y así reencontrarse con la fama y los reflectores.
Ejemplos como Lourdes Munguía, de quien hubo hasta una reimpresión, y hasta la misma Yolanda Ventura tuvieron su segundo aire cuando mostraron sus curvas al mundo y los atributos que las colocaron en las estanterías y en los deseos de cualquier caballero, así como Yuri y Celia Lora.